Por Iñigo Aduriz
20/11/2017
«No venimos aquí a ser protagonistas de un exilio dorado, venimos a trabajar». Con estas palabras se ha expresado este lunes el alcalde metropolitano de Caracas, Antonio Ledezma. Lo ha hecho en su primera intervención pública en Madrid tras dejar la semana pasada su país, donde llevaba casi tres años en arresto domiciliario. En la misma, Ledezma ha insistido que su objetivo en España es organizar a la oposición y al exilio venezolano para lograr el cambio en su país. «Prepárate Maduro, porque ahora vas a escuchar al exilio venezolano en todo el mundo», ha insistido.
Ledezma, a quien han acompañado en su comparecencia el presidente de Ciudadanos, Albert Rivera, o el expresidente colombiano Andrés Pastrana, ha querido dejar claro que él no se siente como un huido de su país. «Los secuestrados no huyen, se liberan», ha insistido tras agradecer a la comunidad internacional su «solidaridad» con Venezuela. Respecto a su salida del país, el alcalde caraqueño ha celebrado que el Gobierno de Nicolás Maduro no contara «con la astucia» que le ha permitido marcharse a España tras cruzar la frontera de su país por Colombia.
«Estaba secuestrado por la narcotiranía de Maduro», ha lamentado, antes de argumentar que Venezuela «se ha convertido en un país de narcotraficantes» en el que «se han cometido crímenes de lesa humanidad» y donde hay personas que «mueren por la escasez de alimentos».
«No hemos perdido la esperanza»
No obstante, se ha mostrado optimista sobre el futuro: «En Venezuela no hemos perdido la esperanza. Nos han robado nuestro oro, nuestras reservas, están robando nuestro petróleo, pero no nos van a robar el alma y el espíritu», ha remarcado, provocando el aplauso de muchos de los presentes en la rueda de prensa, muchos de ellos estudiantes venezolanos o exiliados del país sudamericano.
Respecto a su decisión de poner fin a su arresto domiciliario saliendo de Venezuela, Ledezma ha señalado que lo ha hecho al creer que es «más útil al país en el exilio». También ha dicho que, a pesar de su salida, aún no se siente libre por tener «un peso muy grande». «No puedo dejar de pensar en los presos políticos. No me voy a sentir libre hasta que me entere que han salido de la cárcel todos los presos políticos», ha dicho. En todo caso, ha querido insistir en que el exilio venezolano «va a luchar, va a organizarse, va a recorrer el mundo, sin tregua. No venimos a descansar venimos a trabajar».
Ayuda de militares
En su salida, Ledezma ha reconocido que ha recibido la ayuda de militares venezolanos, así como de diferentes personalidades de Colombia y España. Especialmente útil ha sido, según él, el respaldo del presidente del Gobierno español, Mariano Rajoy. A todos ellos les ha expresado su reconocimiento y agradecimiento.
Además, se ha mostrado muy crítico con la labor de la oposición que apoyó la negociación con el chavismo, al entender que esas conversaciones les dejaron con las manos vacías. Y también ha cargado contra labor de mediación del expresidente del Gobierno José Luis Rodríguez Zapatero, dado que durante su labor han proliferado los «presos políticos» y tuvieron lugar los «asesinatos» de «más de 130 estudiantes» durante las protestas que tuvieron lugar en las calles de Venezuela.