Por Cambio16
18/07/2017
La reforma sanitaria planteada por el presidente estadounidense, Donald Trump, y que pretende reemplazar al Obamacare que aprobó su predecesor en el cargo, está herida de muerte. Anoche, otros dos senadores republicanos anunciaron su oposición al proyecto de ley propiciando un revés monumental al polémico máximo dirigente del país.
My colleague @SenMikeLee and I will not support the MTP to this version of BCRA. #HealthcareBill
— Jerry Moran (@JerryMoran) 18 de julio de 2017
“Mi colega @JerryMoran y yo no apoyaremos la MTP (moción para continuar) con esta versión del BCRA #HealthcareBill (reforma santaria)”, escribió el senador conservador Mike Lee en su cuenta personal de la red social Twitter.
Sus dos votos eran imprescindibles para poder sacar adelante la reforma sanitaria. Y es que los republicanos controlan 52 de los 100 escaños del Senado. Pero mientras los demócratas están unidos contra la polémica legislación, los republicanos se muestran divididos. La semana pasada, los senadores Susan Collins y Rand Paul ya declararon su oposición a la normativa la semana pasada. Además de los cuatro republicanos opuestos, hay una decena que habían mostrado dudas sobre la nueva propuesta, como Ron Johnson.
Con la oposición de Lee y Moran, el proyecto de ley no tiene ninguna posibilidad de obtener una aprobación a menos que el líder de la mayoría del Senado, Mitch McConnell, decida hacer cambios significativos para atraer a los escépticos.
Se trata de la segunda propuesta que los republicanos llevaban a la Cámara Alta, después de que la oposición de sus senadores más conservadores y más moderados forzase retirar la primera versión en junio. Y, al igual que la anterior, la ley contemplaba fuertes recortes a las ayudas para el programa de acceso sanitario a los más pobres, conocido como Medicaid, algo que rechazan los senadores republicanos más centristas.
La Oficina de Presupuesto no partidista del Congreso (CBO, en inglés), contabilizó en entre 22 y 24 millones las personas perderían su cobertura de salud en los próximos diez años con las propuestas conservadoras.