La sobreexplotación del planeta es una de las principales causas de la degradación ambiental y el cambio climático. Según el World Resources Institute, consumimos cada año más de 100.000 millones de toneladas de recursos minerales, biológicos, metales o combustibles. Esto es más de lo que el planeta puede regenerar en un año y solo el 8,6% se recicla o vuelve a tener una segunda vida.
La economía circular nace como parte de la solución a este problema y se plantea como una forma diferente de entender la economía, que permite un crecimiento económico respetando los límites del planeta: podría llegar a reducir el uso de recursos en un 28%, las emisiones mundiales de gases de efecto invernadero en un 39% y, además, solo en la Unión Europea, podría crear cerca de 700.000 puestos de trabajo e incrementar en un 0,5% su PIB de aquí a 2030. Todo ello, basándose en una economía más eficiente y sostenible.
Telefónica integra esta filosofía en sus procesos y en sus compromisos con la sostenibilidad. Para ello, se ha marcado como objetivo ser una empresa Cero Residuos en 2030 poniendo el foco en promover el ecodiseño, optimizar el consumo de recursos, reparar, reutilizar y, cuando no quede más remedio, reciclar, permitiendo así la reincorporación de materiales al ciclo productivo.
Además, la economía circular ayuda a mitigar el cambio climático, donde la compañía cuenta con objetivos de reducción de emisiones que van más allá del Acuerdo de París: cero neto en 2040 en toda su huella, incluida la cadena de valor y, en 2025, en sus mercados principales. De hecho, ha reducido ya en un 70% sus emisiones de carbono por el uso de energías renovables y la integración de tecnologías más eficientes.
Rediseñar, Reducir, Reutilizar, Reparar y Reciclar constituyen las cinco erres de la estrategia de sostenibilidad en Telefónica.
1. Rediseño. Pensar nuevamente el desarrollo de un producto incorporando criterios de ecodiseño permite reducir su impacto ambiental, ya sea incorporando materiales reciclados o incrementando su durabilidad, reparabilidad y eficiencia energética. Por ello, la telco aspira a que todos los nuevos equipos con imagen de marca Telefónica cumplan estos criterios en 2025.
2. Reducir. En línea con el principio de jerarquía de residuos, Telefónica considera que el mejor residuo es aquel que no se produce. Para ello, apuesta por utilizar equipos durante más tiempo y evitar la obsolescencia programada. En esta línea, integra progresivamente requisitos de circularidad en la adquisición de equipamiento electrónico, lo que permite priorizar en la decisión de compra aquellos equipos que se han diseñado para durar o sean fácilmente reparables. Su objetivo es que el 100% de equipos de clientes se compren incorporando estos criterios a partir de 2025.
3. Reutilizar. Telefónica prolonga la vida útil de los equipos reutilizándolos siempre que es posible. Por ello, gracias a diferentes iniciativas ha conseguido dar una segunda vida a casi cinco millones de equipos electrónicos, un 19% más respecto a 2020, y ha evitado la emisión de 381.569 toneladas de CO2. En esta línea, la compañía se ha comprometido a reacondicionar y reutilizar el 90% de los equipos fijos de cliente en 2024.
La economía circular se integra también en el proceso de transformación de la red, donde muchos equipos son reutilizados dentro de la propia red de Telefónica. Para ello, cuenta con una plataforma digital, MAIA, que permite a cada operadora visualizar los equipos disponibles y conectar con otras operadoras del grupo para fomentar su reúso.
4. Reparar. Telefónica ofrece a sus clientes, un servicio de venta de teléfonos de segunda mano. Estos teléfonos pasan por un proceso de reacondicionamiento que consiste en hacerlos regresar al mercado en las mejores condiciones posibles mediante un procedimiento exhaustivo de reparación, comprobaciones y tests de verificación.
Elegir un teléfono reacondicionado evita emisiones y residuos al ampliar la vida útil del dispositivo y, además, podría resultar hasta un 40% más barato con la misma calidad de dispositivo nuevo.
De los teléfonos en desuso que llegan a las tiendas, solo en 2021 se han reacondicionado más de 300.000 teléfonos móviles. El objetivo de la compañía es incrementar esta cifra a 500.000 teléfonos en el horizonte de 2030.
5. Reciclar. Cuando los equipos no pueden reutilizarse, la mejor opción es su reciclaje ya que cada equipo contiene metales preciosos, como oro, cobre o níquel, que pueden ser utilizados como recursos en un producto nuevo.
En Telefónica, el mantenimiento de la red es la principal generadora de residuos, pero también lo son las actividades administrativas que se realizan en las oficinas y, en menor medida, las actividades comerciales con los clientes. Así, en 2021 la compañía ha reciclado el 98% de todos sus residuos, de los cuales el 91% son residuos que proceden de los procesos de transformación de la red. Por ello, la compañía se compromete a ser una ser cero residuos de Red en 2025 mediante la reutilización y el reciclaje.
EFICIENCIA. Entre las conclusiones del Análisis de Ciclo de Vida de las Soluciones de Conectividad de Telefónica España – elaborado en el marco del cumplimiento de los criterios técnicos de la Taxonomía Europea de Actividades Sostenibles y validado por AENOR– se señala que el impacto ambiental por PB de la fibra hasta el hogar (FTTH), es 18 veces menor que la del cobre, es decir un 94%, gracias, entre otros, a los esfuerzos previos de la compañía en términos de eficiencia energética, diseño e implantación de nuevas tecnologías e inversiones en energías renovables.
ECO RATING, LA ETIQUETA ECOLÓGICA PARA MÓVILES
Eco Rating es un indicador que ayuda al usuario final a entender cuán ecológico es el terminal móvil que tiene o piensa adquirir, haciendo así partícipes a los clientes de la importancia de cuidar el medioambiente.
Telefónica es uno de los ocho principales operadores de telefonía móvil de Europa que han unido sus fuerzas para actualizar y poner en marcha este sistema de etiquetado para toda la industria y animar a los fabricantes a reducir el impacto ecológico de sus dispositivos.
A partir de la información proporcionada por los fabricantes de los móviles, cada teléfono se evalúa exhaustivamente y se le asigna una puntuación global de Eco Rating de un máximo de 100 para señalar el comportamiento medioambiental del dispositivo a lo largo de todo su ciclo de vida.
Eco Rating aplica una metodología de evaluación coherente, equitativa y objetiva en 19 criterios diferentes, que culmina en una única puntuación para cada dispositivo. Además, la etiqueta Eco Rating destaca cinco aspectos clave de la sostenibilidad de los dispositivos móviles:
l Durabilidad
Ofrece información sobre la robustez del dispositivo, la duración de la batería y el periodo de garantía del dispositivo y de sus componentes.
l Reparabilidad
Abarca la facilidad con la que se puede reparar el dispositivo, incluyendo el diseño del teléfono móvil y las actividades de apoyo que podrían aumentar la vida útil del producto, mejorando su capacidad de reparación, reutilización y actualización. Cuanto mayor sea la puntuación, mayor será el desempeño de estos aspectos.
l Reciclabilidad
La posibilidad de recuperar y desmontar los componentes del dispositivo, la información proporcionada para permitirlo y la posibilidad de reciclar sus materiales.
l Eficiencia climática
Tiene en cuenta las emisiones de gases de efecto invernadero del dispositivo durante todo su ciclo de vida. Cuanto mejor sea la puntuación aquí, menor será el impacto climático.
l Eficiencia en el uso de recursos
Valora el impacto causado por la cantidad de materias primas escasas empleadas en el dispositivo (por ejemplo, oro para la fabricación de componentes electrónicos) en relación con el agotamiento de los recursos naturales; a mayor puntuación, menor es el impacto en el agotamiento de recursos del planeta.