Por Cambio16
23/11/2016
En otoño, son muchos los árboles que empiezan a madurar sus cosechas: bellotas, avellanas, nueces y también las castañas. Estas últimas tienen un alto valor energético, son ricas en vitaminas, escasas en proteínas y grasas, pero abundantes en azúcares e hidratos de carbono. Son una buena fuente de minerales, entre los que destacan el magnesio, potasio, hierro y fósforo, y según algunos estudios se les atribuyen propiedades tanto antiinflamatorias como vasculares.
La prestigiosa pastelería Ascaso atesora una receta muy dulce con este alimento como protagonista: las castañas del Pirineo. Son bombones artesanos con forma de castaña, realizados a partir de una pasta de este fruto combinada con con crema de castañas al ron, que posteriormente se bañan en chocolate negro Valrhona (61%). Es un dulce apto para celiacos que puede ser consumido por veganos.
Ante la campaña navideña, este año la presentación de este dulce ha renovado su imagen en una caja que cuenta con la ilustradora Ana Cobos. El packaging actual presenta, según la creativa, “un ambiente de cuento para un otoño de cuento. Es un reflejo de la infancia de cada persona: una infancia que pasea por el bosque, recogiendo castañas gigantes, evocando un mundo de sueños inspirado en el disfrute de las pequeñas cosas que, de repente, se hacen grandes. Como las castañas del Pirineo de Ascaso: basta saborear un pequeño trocito de este dulce para apreciar su grandeza, todos los matices que nos transportan más allá del capricho que tenemos entre manos”.
Su precio es de 12,90 €. Están a la venta en las pastelerías de Ascaso en Huesca, Zaragoza y Madrid y en la nueva tienda online.
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