Por Andrés Tovar
15/12/2016
España exportó material de defensa por un valor de 1.837 millones de euros en los primeros seis meses de 2016, lo que supone un aumento del 6,4% respecto al mismo periodo en 2015, según datos publicados por la Secretaría de Estado de Comercio.
«El valor de las exportaciones de material de defensa realizadas en el primer semestre de 2016 fue de 1.837 millones de euros, con un aumento del 6,4% sobre el primer semestre de 2015 (1.727 millones de euros)», informó el departamento encargado del comercio español.
Un 51,2% de las exportaciones de armas realizadas por España tuvieron como destino países de la Unión Europea y la OTAN en operaciones por un valor aproximado de 941 millones de euros.
Según detalla Comercio, el resto de las exportaciones (895 millones de euros) se reparten entre 53 países, entre los que destaca Omán con un gasto de 196 millones y Egipto con un gasto 138 millones de euros.
Entre los países que constan en la relación de países que compran armas a España destaca la presencia de Arabia Saudí, que en los primeros seis meses de 2016 recibió granadas de mortero, proyectiles iluminantes y piezas de equipos de tierra por valor de 70 millones de euros.
La venta de armas a Riad desde España ha sido objeto de polémica en los últimos años debido a las sospechas por parte de organizaciones como Amnistía Internacional de que esos materiales son utilizados para violar los derechos humanos en ataques contra civiles en Yemen.
Por categorías de productos, las aeronaves acumularon el 73,2% de las exportaciones españolas en los primeros seis meses del año, con un valor de 1.345 millones de euros. En lo referente a productos y tecnologías de doble uso, España realizó exportaciones por un total de 154 millones de euros en el primer semestre de 2016. «El principal destino de estas exportaciones fue Estados Unidos, con 89,2 millones de euros y un 57,8% del total», detalló Comercio. En ese apartado también destaca el envío a Irán de válvulas de control de acero inoxidable para infraestructuras petroquímicas, de gas y de petróleo por valor de 11,5 millones de euros. El informe de la Secretaría de Estado destaca que las instalaciones y equipos nucleares supusieron un 49,4% de las exportaciones de material de doble uso.
Sube el presupuesto
Entretanto, este jueves, la ministra de Defensa, Mª Dolores de Cospedal, adelantó en una reunión con los portavoces de los grupos parlamentarios que aumentará el presupuesto del Ministerio de Defensa.
En concreto, se aumentará el presupuesto en más de un 30% respecto a años anteriores, mientras se recortan las principales partidas sociales.
En estos presupuestos se integrarán los pagos de los Programas Especiales de Armamento (PEAs) en el presupuesto ordinario del departamento, según adelantó Cospedal. Los PEAs son 19 programas para el desarrollo y compra de grandes sistemas de armas, entre ellos la fragata F-100 o el submarino S-80 de Navantia, el avión A400M o los cazas Eurofighter de Airbus. El precio, oficialmente, es de 30.000 millones de euros.
Cospedal ya había adelantado en noviembre durante la primera sesión de control al Gobierno que no planea reducir el gasto en el ámbito defensivo.
«Hay regímenes totalitarios y populismos que pretenden acabar con nuestro sistema de valores, es obvio que tenemos que tratar de defendernos y para eso los gastos en Defensa son fundamentales», aseguró Cospedal.
En opinión de la ministra es «una obviedad» que no pueden existir «libertad, igualdad y derechos si no hay seguridad» y, a su modo de ver, «esa seguridad hoy está amenazada». «Y también es una obviedad que esto no lo digo yo, sino todas las organizaciones de las que España forma parte, lo dicen todos los gobiernos responsables que utilizan su Defensa para garantizar las estructuras que mantienen las sociedades del bienestar», sentenció Cospedal.
11.527 millones
La industria de defensa española exportó en la última legislatura, presidida por el conservador Mariano Rajoy, material armamentístico por valor de 11.527,4 millones de euros, según datos de las organizaciones Amnistía Internacional, FundiPau, Greenpeace y Oxfam Intermón. Esta cifra supera con mucha distancia, casi el doble, a la registrada en el período anterior, en el que las ventas ascendieron a 6.446,87 millones.
«Principalmente se trata de bombas, cohetes y misiles», detallan, «no se trata de un comercio inocuo, son productos pensados para matar y destruir». A las ONG les preocupa en especial que estas armas fabricadas en España se estén utilizando para cometer «crímenes de guerra o atrocidades». Las organizaciones piden a los partidos políticos que se comprometan en esta campaña electoral a reforzar la supervisión, el control y la transparencia en el comercio armamentístico, además de cumplir el tratado sobre el Comercio de Armas, que el Gobierno español ratificó en el 2014.
Los países a los que llega armamento de fabricación española son Colombia, Egipto, Pakistán, Israel o Camerún, según el informe. En la última legislatura, el único país vetado por el Gobierno para la venta de armas fue Venezuela.