La ley climática en España es insuficiente para alcanzar la competitividad una vez superado un periodo de moratorias y trabas administrativas que impedían el desarrollo del sector, como el denominado impuesto al sol. La energía fotovoltaica se perfila como la más barata, eficiente y sostenible en una coyuntura en la que el hidrógeno se revela como la gran alternativa verde en el transporte.
Con todo, las renovables no impulsarán la transición si se limitan a paneles y tejados. Se precisan plantas y una normativa clara para mitigar su impacto ambiental e impulsar la renaturalización. El autoconsumo equilibrará un mercado que necesita consolidar soluciones de almacenamiento.
III CONGRESO INTERNACIONAL DE SOSTENIBILIDAD DEL MEDIO AMBIENTE MESA DE DEBATE I Energía Verde
La eficiencia energética y las energías renovables son los principales pilares de la transición energética. La descarbonización del sector eléctrico, con predominio de fuentes de energía renovables, consolidará un futuro energético sostenible en todos los sectores, fundamentalmente industria, transporte y edificación.
Junto a las fuentes renovables de generación de energía, como la eólica o la solar, el hidrógeno va a jugar un papel clave en la transición energética. José Donoso, que desde UNEF –la asociación empresarial de referencia del sector fotovoltaico– contribuye a visibilizar el potencial de la energía fotovoltaica como fuente de oportunidades para la transición energética, y como garantía de sostenibilidad ambiental y social de acuerdo con todos los agentes, aseguró que ocupar territorio con una planta fotovoltaica supone hoy una oportunidad para la biodiversidad.
«Hay que reforzar la ambición de los objetivos, la ley climática en España es insuficiente»
MAR ASUNCIÓN
La renaturalización de estos espacios implica limitar el impacto visual, establecer zonas protegidas, no usar agua y proteger la fauna, además de generar beneficios económicos y sociales en la población local. Por su parte, Mar Asunción reclamó que hay que ser más ambiciosos con los objetivos.
La representante de WWF España se refirió al Programa de las Naciones Unidas para el Medio Ambiente (PNUMA), que alerta sobre los planes de muchos países de producir más del doble de energías fósiles de lo que la ciencia aconseja para evitar impactos climáticos catastróficos. Exigió, en este sentido, un impulso por parte de la COP26. “Hay que reforzar la ambición de los objetivos, la ley climática en España es insuficiente”, afirmó. Para Asunción es fundamental la instalación de energías renovables: “Las necesitamos, pero con criterios sociales y ambientales. El tema de la zonificación vinculante y un escrupuloso estudio de impacto ambiental son primordiales a la hora de la instalación de las renovables”.
En palabras de Antonio González, vicepresidente de la Asociación Española del Hidrógeno (AeH2) “el hidrógeno ha venido para quedarse”, principalmente porque el costo de producción ha bajado y las políticas de descarbonización sin un vector como el hidrógeno no son sostenibles. “España ha pasado de ser un país dependiente a un país exportador”, añadió. Las ventajas del hidrógeno pasan por prestar servicio de almacenaje de energía y es integrador de sectores.
El hidrógeno contribuye a descarbonizar la industria; al transporte, conectando el sector eléctrico y gasista y al sector residencial. “Este conocimiento y potencial – lamentó González– no se ha transmitido a las empresas”. Pedro García Ibarra, catedrático de la UNED, habló sobre algunas alternativas para sustituir los combustibles fósiles. Destacó la necesidad de trabajar más tecnológicamente en pilas de coches para abaratar el costo y ser reemplazada por la pila de combustible alimentada por hidrógeno.
Para evidenciar la falta de despliegue del almacenamiento en España, desveló que hay solo dos empresas nacionales dedicadas a su desarrollo. Raúl Morales, CEO de Soltec, la firma líder del mercado europeo con una experiencia de 17 años en energía solar, precisó que “estamos protagonizando esta transición con la energía más barata, por debajo de 30 euros el kilovatio hora”. Sin embargo, denunció una enorme falta de decisión en Occidente, no solo en España y Europa. “Se necesitan plantas –dijo–. Vemos cómo esta transición se retrasa por falta de decisión y valentía”.
El CEO de Soltec sugirió a la ciudadanía y las empresas que quienes tengan el espacio suficiente deberían instalar tantos paneles fotovoltaicos como sean posibles porque “la solución es el autoconsumo”.
Alfonso Pascual, en representación de Engie España, explicó que trabaja en una empresa energética con presencia en 70 países. “Nuestro propósito es actuar para acelerar la transición hacia la neutralidad en carbono, reduciendo el consumo energético mediante las soluciones más eficientes, descentralizadas y respetuosas con el medio ambiente. El camino no es solo a través de la producción, sino también del consumo, estamos en toda la cadena”. En una situación tan compleja, concluyó, el autoconsumo no es tan sencillo.