Por Cambio16
21/11/2017
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La Torre Agbar, que había sido elegida por la alcaldesa de Barcelona, Ada Colau, como el edificio para albergar la sede de la Agencia Europea del Medicamento (EMA), nuevamente vuelve al mercado inmobiliario después de que Barcelona cayera este lunes en la primera ronda de la elección.
El rascacielos, uno de los símbolos de Barcelona, es propiedad de Merlin Properties, mide 142 metros, dispone una superficie de 37.614 metros cuadrados, distribuida en 34 plantas y en un auditorio para más de 350 personas.
La empresa compró el edificio -un encargo originalmente para Aguas de Barcelona– en enero de 2016 por 142 millones de euros con la idea de alquilar oficinas, pero ante la petición de Colau, de reservar el edificio para la candidatura, la retiraron temporalmente del mercado.
Ahora, tras los resultados del lunes, Merlin nuevamente vuelve a buscar inquilinos para 30 de sus pisos.
Sus 34 plantas nunca han estado plenamente ocupadas, Agbar no lo llenó y tuvo poco éxito al alquilar las plantas vacías.
Sobre este particular, El País reseña algunos problemas de la emblemática estructura.
«Cuando Agbar puso metros en alquiler, a las empresas les costó instalarse en casa de otra firma. Hasta que la propia compañía de aguas se mudó de nuevo a partir de 2015. El edificio, además era poco práctico. Lo cuentan quienes han trabajado en él. Plantas circulares donde es difícil encajar despachos cerrados, demasiada luz, los ascensores y los baños están en el centro de las plantas, no ves a los compañeros…» precisa el rotativo.
El alquiler en Barcelona, en problemas
Agrega El País que la no concreción de las aspiraciones de Barcelona en torno a la EMA -y por ende para la Torre Agbar- representa un «duro golpe» para el mercado inmobiliario de la ciudad condal, que en el último mes se las ha visto muy difíciles.
“Para el sector inmobiliario, que ya viene tocado desde septiembre, supone un ‘palo’ que se notará a medio y largo plazo. Desde la vuelta del verano se han deshecho varias operaciones que ya no saldrán, llevamos ya semanas en las que apenas se cierran operaciones de compraventa. El mercado está parado” dijo Fernando Encinar, jefe de estudios del portal Idealista, al rotativo.