Por Benito Guerrero
03/06/2016
Durante esta semana se ha celebrado en Madrid, en el Centro Cultural Conde Duque la tercera edición del Madrid Fashion Film Festival. El certamen se ha consolidado entre otros festivales de este tipo, en los que «se crean sinergias entre el mundo de la moda y el cine», en palabras de su director, José Murciano.
El jurado de esta edición -compuesto por Paz Vega, Ruth Hogben, Rossy de Palma, Paco Delgado, Alba Galocha, Felix Sabroso, Leticia Dolera, Jean-Philippe delhomme, Simon de Santiago, Laura Ponte, Andy lee y Debra Smith- ha premiado con el galardón principal al fashion film de William Williamson, The Silent Conversation.
Este trabajo muestra la importancia que está adquiriendo el vestuario en países como Pakistán. El director hace hincapié en la estrecha relación que existe entre la ropa y la tradiciones socioculturales que parecen estar cambiando en los últimos años.
En un país en el que la gente alza la voz cada vez más en contra de las costumbres establecidas, la moda se convierte en algo más que un modo de vestir y se utiliza como bandera de los cambios sociales. Esto es lo que muestra el fashion film ganador de la última edición del MadridFFF.
Durante la gala, presentada por una Macarena Gómez que hizo reír a todo el auditorio, se entregaron otros galardones como Best National Fashion Film –High Tide de Albert Moya-, Best Photography –Clubland de Santiago & Mauricio-, Best Art Direction –Our Family knows glasses de Dean Alexander-, Best Script –A fistful of wolves de Danny Sangra-, y Best Performance -Jon Kortajarena por Thirty-six hours-.
Además, Conde Nast quiso premiar #FashionToBeFree, el fashion film del diseñador español David Delfín en el que une esfuerzos con DDBSpain para defender la libertad de las mujeres.