Por Efe
ACTUALIZADO 13/10/2016
La gestora del PSOE teme una ruptura de la disciplina de voto en las filas socialistas de cara a la investidura y ya ha avisado a todos sus diputados de que tienen la obligación de acatar lo que acuerde el Comité Federal, tanto si mantiene el «no» a Mariano Rajoy como si pasa a la abstención.
Una advertencia que ha lanzado este jueves el portavoz de la gestora, el socialista andaluz Mario Jiménez, después de que los dos candidatos a liderar el PSC, Miquel Iceta y Núria Parlón, se hayan mostrado partidarios de romper la disciplina de voto en una hipotética abstención al candidato del PP.
«Cuando se produzca el pronunciamiento del Comité Federal esa será la posición del PSOE y todos, absolutamente todos los diputados y el conjunto del partido, tendrán que acatarlo», ha recalcado Jiménez, que ha apostillado: «Esa es la esencia de la democracia».
No obstante, Jiménez ha reconocido que el PSC es «otro partido» y que existe una «especificidad» aunque ha insistido en que si participa de la toma decisión del Comité Federal «necesariamente» tendrá que respetar lo que se acuerde.
Un Comité Federal para el que todavía no hay fecha, aunque el presidente de la gestora, Javier Fernández, ha avanzado que se dará a conocer la semana que viene.
Fernández no ha querido ahondar en sus diferencias con la presidenta de Baleares, Francina Armengol, que el miércoles le trasladó personalmente su rechazo a la abstención a Rajoy durante la recepción oficial en el Palacio Real.
«Cada uno en el partido tiene la opinión que considera más ajustada y yo no voy a discutirlo en absoluto. Cada uno opina de una manera, la suya, y eso se saldará en el Comité Federal», ha subrayado.
Entretanto, los críticos con la actual gestora continúan reclamando la convocatoria inmediata de un congreso extraordinario del partido.
Unos 500 alcaldes socialistas de toda España se han sumado a la iniciativa promovida por el primer edil de Jun (Granada), José Antonio Rodríguez, de que la gestora convoque ese congreso y unas primarias para elegir a un nuevo secretario general.
Rodríguez, que ha registrado en Ferraz un escrito en el que denuncia que la gestora se está extralimitando de sus funciones, ha informado de que tiene recopiladas 69.832 firmas de afiliados -de las 93.720 necesarias- para forzar la convocatoria de un congreso.
También se ha desmarcado de la actual línea oficial el exlehendakari Patxi López, que ha reiterado su «no» a Rajoy y ha afirmado que su partido «no debe tener miedo» a unas posibles terceras elecciones porque se presentaría a las mismas «con la fortaleza de la coherencia»
Más allá del debate interno en el PSOE, el Gobierno ha vuelto a apelar al «sentido común, la racionalidad y el patriotismo» de los socialistas para que haya una investidura.
En una entrevista en Catalunya Ràdio, el ministro de Asuntos Exteriores, José Manuel García-Margallo, se ha mostrado seguro de que antes de que acabe el mes de octubre habrá gobierno y ha opinado que España «necesita dos partidos centrales que se puedan alternar sin que pase nada».
Su compañero en el gabinete Jorge Fernández Díaz ha abogado por dar tiempo al PSOE para que tome sus decisiones y ha expresado su confianza en que el próximo 31 de octubre ya esté investido el nuevo presidente del Gobierno y se eviten las elecciones.
También desde el PP, la secretaria general del partido, María Dolores de Cospedal, ha asegurado que su partido está haciendo «lo indecible» para que España tenga un «gobierno de estabilidad, seguridad y de futuro».
Por su parte, Ciudadanos mantiene su «sí» a Rajoy pese a lo que se está conociendo en el juicio del caso Gürtel y lo justifica en el que «corsé anticorrupción» que impuso al PP para su acuerdo de investidura y que le está obligando a dar pasos contra esta lacra.
El vicesecretario general de Ciudadanos, José Manuel Villegas, ha recordado que el PP «no renovado ni regenerado» que encabeza Rajoy ya ha tenido que tomar decisiones, como en el caso del exministro José Manuel Soria o la exalcaldesa de Valencia Rita Barberá.
«Los compromisos con Ciudadanos se cumplen, no porque el PP quiera sino porque le obligamos», ha destacado.
Las críticas al cambio de actitud del PSOE se han repetido en Podemos y ERC.
El líder de Podemos, Pablo Iglesias, ha confesado que observó una «profunda empatía y cariño» entre Mariano Rajoy y la presidenta andaluza, Susana Díaz, en los actos de la Fiesta Nacional lo que refleja, a su juicio, el seguro apoyo del PSOE a la investidura.
Iglesias ha reconocido -en una entrevista en Telecinco- que, de momento, no ha mantenido ningún contacto con el presidente de la gestora, Javier Fernández, a quien ha acusado de tener un lenguaje «antiguo» y de criticar más a Podemos que al PP.
También el portavoz de ERC, Joan Tardá, ha considerado «triste» que el PSOE prefiera una «España azul» y «reaccionaria» junto al PP antes que «una España en la que se reconozca el derecho a decidir» en Cataluña.