Por Benito Guerrero
Los dueños de las salas y las distribuidoras son los que deciden las películas que componen la cartelera de los cines cada semana. La creación de plataformas de cine bajo demanda en España –Youfeelm y Screenly– puede cambiar este ecosistema.
El cine bajo demanda consiste en que los espectadores son los que deciden lo que se ve en los cines de su ciudad. «Depende del tamaño de la sala, su ubicación y la película que se vaya a proyectar. De media, suelen ser necesarios desde unos 60 a 90 espectadores», cuenta Esperanza Moreno de Youfeelm a Cambio16. La plataforma está disponible desde el 15 de junio de este año.
Este nuevo formato de proyección cinematográfica ha tenido éxito en lugares como Estados Unidos o Gran Bretaña.
Screeenly, que se lanzó al público el 7 de mayo, se encuentra «en plena fase de prueba piloto, limitados a unos pocos cines de Barcelona y con un incipiente catálogo, testando, corrigiendo y preparándonos lo mejor posible para iniciar la expansión por todo el país». Sus responsables confiesan que «confían muchísimo, pero son conscientes de que la implantación será lenta y que tienen que trabajar mucho para conseguirlo».
Ambas plataformas tienen un funcionamiento similar. El usuario elige una película del catálogo que tiene disponible cada una de las webs. Después de este paso se convierte directamente en promotor del evento. Después, sólo queda encontrar un número de espectadores suficiente para que la proyección sea rentable para todas las partes.
Con Youfeelm se han podido llevar a cabo tres proyecciones en España, todas ellas exitosas y con asistentes más allá del mínimo necesario para hacer los eventos rentables. La promoción del evento en las plataformas y los recursos del promotor, como pueden ser las redes sociales, son los mecanismos que les ayudan a conseguir espectadores que quieran disfrutar de la misma película.
«Una herramienta para que los espectadores tomen el poder, se puedan convertir en promotores de eventos y se organicen para conseguir ver lo que quieran ver, dónde y cuándo ellos decidan, automatizando procesos y alegrías». Así se autodefinen en Screenly.
Otra vía para disfrutar del cine bajo demanda es unirte a algunos de los eventos ya creados por otros usuarios de estas plataformas.
En España, por el momento, las plataformas de cine bajo demanda son limitadas. Youfeelm tiene un catálogo escaso y funciona en ciudades como Sevilla, Madrid o Huelva, con más de treinta salas. Por su parte, Screenly sólo está operativa en Barcelona.
¿Una amenaza para los cines?
La Federación de Cines de España incluye este nuevo uso de las salas de cine dentro de “contenidos alternativos” -como proyección de ópera en el cine o karaokes- y no tienen una posición definida sobre estas plataformas. No lo ven ni como una amenaza ni como una oportunidad.
Cine y música: nosotros ponemos los films y las salas, tú junta a los fans y crea el evento. https://t.co/Xd6nt47fpt pic.twitter.com/hEST8eyXag
— Screenly (@Screenly) July 16, 2015
Esta nueva forma de ofrecer cine es valorada como un aliciente para que productores y directores se acerquen a los espectadores. La presencia de personajes relevantes o parte del reparto en las proyecciones, puede ser un valor añadido de esta iniciativa.
Un nuevo modelo de negocio
“Es una nueva tendencia a la cual todos nos tenemos que adaptar. Al final el cine, como cualquier negocio, funciona con la ley de oferta y demanda. Invertir la fórmula me parece un gran avance, ya que sabes con certeza que el producto va a funcionar, porque ha sido elegido previamente”, cuenta Borja Morais, Social Media de Vértigo Films. “En los tiempos que corren, donde el sector cinematográfico ha sufrido una considerable recesión, que aparezcan nuevas ideas para fomentar el cine, y por tanto, la cultura, deben ser bienvenidas», añade.
Las dos plataformas planean ya la ampliación de sus catálogos de películas, así como el numero de salas disponibles para organizar el evento. Si este nuevo modelo de negocio funcionará es España todavía es una incógnita.
La idea parece atractiva a simple vista, pero necesita del apoyo a largo plazo de distribuidores, promotores y salas de cine.