Los pacientes con enfermedades crónicas o enfermedades no transmisibles son los más sensibles a contraer el COVID-19 y estudios recientes así lo han demostrado. Estudios revelan que aquellos que se encuentran en estado crítico por el virus, se les ha detectado que tenían, al menos, una de ellas.
En una reciente teleconferenciaorganizada por la Coalición Latinoamérica Saludable, México Salud-Hable y la Alianza de ENT. El médico Anselm Hennis, director del departamento de ENT y Salud Mental de la Organización Panamericana de la Salud, expresó entre el coronavirus y los enfermos crónicos existe una relación mortal.
La representante de la Fundación InterAmericana del Corazón, Beatriz Champagne, asegura que el 71% de las muertes en el mundo se deben a las ENT. Pero aún es más preocupante que el epicentro de contagios de la COVID-19 se encuentra hoy en América Latina.
Champagne señala que la COVID-19 provoca una “significativa interrupción” de servicios para la prevención y tratamiento de los enfermos crónicos en casi todos los países.
Enfermos crónicos vs la COVID-19
Cálculos realizados por la Organización de la Salud indican que esta relación pacientes crónicos-coronavirus podría generar un aumento a largo plazo de las muertes por enfermedades no transmisibles. «Los más afectados serían aquellos en países con ingresos bajos y medios, lo que está matando a un gran número de enfermos crónicos», ha advertido Champagne.
Las consideraciones que realizaron los ponentes en la teleconferencia, en cuanto a la relación-ENT-coronavirus, son
- La COVID-19 y las enfermedades cardiovasculares, hipertensión y diabetes tienen el doble de riesgo de muerte.
- El consumo de cigarrillo/tabaco es especialmente mortífero. Los fumadores tienen 14 veces más posibilidades de desarrollar complicaciones por la COVID-19, entre ellas la neumonía, que quienes no fuman.
- Las personas con sistemas inmunitarios comprometidos con tratamientos para el cáncer, diabetes, EPOC, personas con tratamientos con esteroides, entre otros, tienen un riesgo más alto de desarrollar complicaciones por el virus.
- Las personas que viven con tres o más comorbilidades (hipertensión, diabetes, EPOC/asma, tuberculosis, obesidad, fumadores/as) tienen un riesgo más alto de desarrollar complicaciones por COVID-19.
- De los fallecidos en Italia por coronavirus, el 98,8% tenía al menos una comorbilidad, y el 48,6% sufría tres o más comorbilidades.
- El 73,8% de las personas fallecidas, sufrían de hipertensión.
Sin servicio y sin teletrabajo
En la teleconferencia se trató el punto de los tratamientos de ciertas enfermedades contra los indicados por COVID-19. La conclusión es que se necesita urgentemente una investigación al respecto, sobre todos con las enfermedades, renales agudas, mal funcionamiento neurológico, coágulos de sangre, hígado y función intestinal.
El seguimiento de las recomendaciones de salud pública y el autoaislamiento puede no ser posible para muchos. En América Latina se encuentran algunas variables. Entre los más comunes se encuentran los hogares superpoblados, zonas sin agua potable. Otras consideraciones son los que no pueden trabajar desde casa ni seguridad.
El informe también se hace de las personas con cáncer, porque sus tratamientos pueden ser vulnerables a la infección, y su sistema inmunitario se encuentra más débil.
Mayores riesgos
Las personas de cualquier edad con las siguientes afecciones tienen mayor riesgo de enfermarse gravemente a causa del COVID-19:
- Enfermedad renal crónica.
- EPOC (enfermedad pulmonar obstructiva crónica).
- Personas inmunodeprimidas (sistema inmunitario debilitado) por trasplante de órganos sólidos.
- Obesidad (índice de masa corporal [IMC] de 30 o superior).
- Afecciones cardiacas graves, tales como insuficiencia cardiaca, enfermedad de la arteria coronaria o miocardiopatías.
- Enfermedad de células falciformes.
- Diabetes mellitus tipo 2.
- Los niños con complejidades médicas, que tienen afecciones neurológicas, genéticas o metabólicas, enfermedad cardíaca congénita.
La OMS publicó en el mes de junio una encuesta sobre los servicios de prevención y tratamiento de las enfermedades no transmisibles interrumpidas por el coronavirus. El sondeo se llevó a cabo en 155 países durante tres semanas en mayo, revelando que si bien el impacto es global, los países con bajos ingresos económicos son los más afectados.
La OMS en estado de alerta
Tedros Adhanom Ghebreyesus, director general del organismo, explicó que muchas personas necesitaban tratamiento para diferentes patologías. Entre las más afectadas se encuentran el cáncer, padecimientos cardiovasculares y diabetes. Cerca del 53% de los países interrumpieron parcial o totalmente los programas de tratamiento de hipertensión, diabetes y complicaciones relacionadas con esta enfermedad.
Con respecto a los tratamientos por cáncer, los tratamientos se afectaron en 42% de los países. Mientras que las emergencias cardiovasculares, la afectación abarca al 31%.
La OMS también considera positivo que más del 70% de las naciones recopilen datos de los pacientes con la COVID-19 que sufren enfermedades crónicas. Sin embargo, la data completa demorará algún tiempo para conocer el impacto de la pandemia en las personas con tratamientos.
Un dato destacable de la OMS es que las enfermedades crónicas matan a 41.000.000 de personas al año, es decir, el 71% de las muertes a nivel mundial. De esa cifra, 15.000.000 son pacientes entre 30 y 69 años. El 85% de estos fallecimientos ocurre en países de bajos y medios ingresos. Lea también: