Desde su fundación, en 1876, Damm ha procurado el cuidado del entorno donde desarrolla sus actividades y la preservación del medioambiente. Este compromiso con la sostenibilidad, eje estratégico de su modelo de negocio, se traduce en una apuesta por la circularidad cuyo objetivo es la descarbonización, la reutilización de residuos y la eficiencia energética y de los sistemas productivos. Damm genera valor para el planeta y un impacto positivo en la sociedad.
La necesidad de apostar por procesos productivos que promuevan el uso responsable de los recursos y el fomento de modelos operativos que sigan los principios de la economía circular es una clara prioridad para la industria del siglo XXI. En 2020, la Comisión Europea adoptó un nuevo plan de acción para la economía circular, uno de los principales elementos del Pacto Verde Europeo que promueve el crecimiento sostenible. La estrecha colaboración entre instituciones públicas, la industria y los consumidores ha permitido que durante los últimos años la transición hacia una economía circular sea una realidad y Europa siga avanzando en su camino hacia una economía competitiva y climáticamente neutra.
La economía circular reduce la presión sobre los recursos naturales y es una condición imprescindible para alcanzar el objetivo de neutralidad climática para 2050 y combatir la pérdida de biodiversidad. En este sentido, hoy encontramos compañías que han elevado la circularidad hasta la cima de sus prioridades estratégicas. Damm es un claro ejemplo. Fundada en Barcelona en 1876 por el maestro cervecero August Kuentzmann Damm, ha conseguido convertirse en una de las cerveceras líderes en España.
Compromiso con el medioambiente desde el origen
El compromiso con el medioambiente y el cuidado del entorno en el que opera han formado parte de la identidad de la compañía desde sus orígenes. Consciente de la necesidad de originar un impacto positivo en la sociedad a corto, medio y largo plazo, Damm ha consolidado la sostenibilidad como uno de sus ejes estratégicos a través del cual genera valor para el planeta desde la circularidad y la eficiencia.
La compañía lleva más de 20 años apostando por un modelo de recuperación de recursos, incluyendo la producción de energía verde a partir de ellos, el uso de materiales más sostenibles y la mejora de la eficiencia de los sistemas productivos, de distribución y de valorización de los residuos generados.
En su apuesta por el crecimiento eficiente y la producción sostenible, Damm aprovecha hasta el 99% de materias primas que adquiere en producir cerveza, y los residuos del proceso productivo, los valoriza como subproductos, dándoles una segunda vida al reincorporarlos de nuevo a la cadena de valor. Un ejemplo de esta circularidad es la reutilización de la levadura y el bagazo como materias para alimentación animal.
En esta misma línea de revalorización y circularidad, Damm recupera la casi totalidad del CO2 producido por la levadura durante la fermentación del mosto para aprovecharlo y ser autosuficiente en gas carbónico. En este sentido, también destacan proyectos como la reutilización de la mezcla hidroalcohólica –resultado del proceso de desalcoholización para producción de cerveza 0,0– como materia prima para elaboración de productos como alcohol desinfectante o vinagre. Y la de los residuos finales del proceso de filtración de la cerveza como enmienda orgánica para los cultivos. Asimismo, Damm proporciona una segunda vida a los residuos de vidrio y aluminio generados en las fábricas introduciéndolos en el proceso de producción de nuevas botellas y latas.
La sostenibilidad como eje fundamental
En su misión por reducir el impacto negativo en el entorno, Damm fue pionera dentro del sector al impulsar un proyecto de sustitución de las anillas que agrupaban sus packs de latas, así como los plásticos que los envolvían, por cartón 100% biodegradable. Esta medida, que ha conseguido reducir 359 millones de toneladas de plástico al año, se suma al resto de acciones llevadas a cabo por Damm en materia de packaging, que incluye medidas como conseguir que el 65% de los envases de Estrella Damm sean reutilizables y el 100% reciclables.
Su camino por contribuir a frenar el cambio climático se materializa también a través de sus esfuerzos por incrementar la eficiencia energética de sus operaciones. En este sentido, la compañía ha ampliado sus instalaciones fotovoltaicas hasta alcanzar los 33.927 m2, consolidándose como la empresa de la península ibérica con mayor extensión de autoproducción de energía solar. Damm también cuenta con plantas de cogeneración a partir de biogás instaladas en algunas de sus fábricas, que producen electricidad y vapor o agua caliente simultáneamente con el objetivo de generar energía verde a partir de la depuración de sus aguas residuales.
En los últimos años, la compañía ha apostado por un modelo energético que fomenta la autosuficiencia energética y ya autoproduce el 50% de la energía eléctrica que consume en su actividad. Gracias al desarrollo de una fuerte estrategia de ahorro energético, el conjunto de medidas impulsadas durante los últimos 15 años ha permitido a Damm reducir en un 36% la energía necesaria para la producción de cervezas en sus plantas.
Pacto con la Agenda 2030
El negocio de Damm abarca todo el proceso del campo a la mesa, desde la fabricación hasta el envasado y la entrega del producto. Por ese motivo, la compañía trabaja constantemente para que la sostenibilidad impregne todos sus ámbitos de actividad. Su éxito es posible gracias al empeño diario del Departamento de Optimización Energética y Medio Ambiente, un equipo de profesionales cuyo objetivo es impulsar nuevos sistemas que permitan reducir el consumo de recursos naturales, valorizar los residuos y recursos y generar energía de origen renovable. Además, desde 2020, la compañía cuenta también con un Comité de Sostenibilidad, el cual impulsa aún más iniciativas dentro del modelo de negocio sostenible y responsable que promueve Damm.
Damm dio un paso más en su compromiso con el medioambiente cuando en 2019 se adhirió al Pacto Mundial de las Naciones Unidas y a la Agenda 2030. Con el apoyo a esta iniciativa mundial, la compañía trabaja activamente para conseguir los Objetivos de Desarrollo Sostenible de la Agenda 2030, la hoja de ruta que guía cualquier acción de sostenibilidad durante la presente década.
Consciente de que los recursos naturales son bienes limitados, Damm complementa su labor en materia de sostenibilidad con la constante sensibilización de los grupos de interés sobre la necesidad de hacer un uso responsable de los recursos que permita a toda la sociedad seguir avanzando en su senda hacia lograr una economía sostenible.