Su misión es introducir la carne vegetal en la dieta de los amantes de la carne sin que tengan que hacer sacrificios. No pretenden dar lecciones de ética ni de moral a nadie, solo quieren ofrecer productos excelentes que cambien la percepción de los consumidores. En Let it V Foods aspiran a redefinir el concepto de la carne y que la opción plant based sea cada vez más inclusiva.
Su carne vegetal tiene una textura muy auténtica y es tan sabrosa que no se nota la diferencia. Su propuesta conforma una dieta saludable y respetuosa con el planeta y sus habitantes. Con sabor e identidad, pretenden acabar con todos los complejos que suscita la carne vegetal mediante el dominio de la técnica de procesamiento de los alimentos, la eficiencia operativa y el foco en la comunicación puestos al servicio de la consciencia ética y sostenible.
Jorge Osés comenzó a fraguar la idea de producir carne vegetal el día en que se topa con un anuncio publicitario de una compañía estadounidense que ofrecía una hamburguesa vegetal que ‘sangraba’. Viajó a Nueva York para probarla y alucinó. Ahí empezó todo. A mediados de 2021, cofunda Let it V Foods, cuya misión es crear experiencias gastronómicas ricas, sostenibles y más saludables que las tradicionales.
¿Qué impacto tiene nuestra alimentación en el planeta?
La industria alimentaria es ineficiente con respecto al impacto que produce en el planeta. Los datos son alarmantes. El sector de la ganadería ocupa el 80% de los campos de cultivo del mundo, pero, a cambio, solo reporta un 20% de calorías. Si comparas los resultados y el uso de los recursos del sector de la ganadería y de la agricultura y los enfrentamos… ¡da miedo!
Y la conclusión es que, usando la misma cantidad de legumbres y cereales, puedes optar entre alimentar a toda Europa con carne de vaca o alimentar siete veces el planeta entero con carne vegetal. Aquí se ponen en jaque varias cuestiones como, por ejemplo, la repartición de recursos. Es necesario ver a un animal como un conversor de alimento: la vaca come pienso, que se convierte en bistec, pero, si por el camino se pierden calorías, algo está fallando.
PLANT BASED. Vivimos en una época de gran variedad de oferta gastronómica y, en los últimos años, ha habido un cambio muy relevante en el comportamiento de los consumidores, que demandan cada vez más productos vegetales. La dieta plant based se basa en consumir productos de origen vegetal (frutas, verduras, legumbres, cereales, frutos secos, soja, etc.) y, por lo tanto, eliminar al máximo los alimentos de origen animal. Los beneficios de seguir una dieta plant based son muy positivos tanto para la salud del planeta como de los animales y personas.
Para empezar, las subvenciones millonarias del sistema cárnico. Y lo curioso es que hay muchísimos más animales que personas, pero es imposible alimentar a todo el mundo. Es chocante. Además, nuestro sistema de alimentación tradicional contribuye al cambio climático porque la industria animal es la segunda responsable del calentamiento global, y los campos de cultivo destinados a la ganadería de pasto y alimentación son la principal causa de deforestación.
Un buen ejemplo es el Amazonas, donde la máxima deforestación que está sufriendo, sobre un 80%, corresponde a la demanda de la industria cárnica (Yale, 2019). La industria cárnica también es la primera en utilización de agua (Mekonnen & Hoekstra, 2012). El tema es que no es solo una vaca todo lo que se necesita para comerte un filete, sino muchos cereales y una gran cantidad de agua para conseguir, a cambio, muy poca carne.
Entiende que no es realista que la sociedad en su conjunto se abrace al veganismo. Por ello, propone que nos convirtamos en veganos de alterne. ¿En qué consiste esta dieta?
En Let it V Foods somos conscientes de que no va a haber un cambio de mentalidad o de costumbre a nivel masivo. No todo el mundo será vegano en un futuro. Por la tradición de cultura cárnica y, también, por la desinformación a nivel nutricional. Para nosotros, la clave está en los pequeños cambios de hábitos a escala industrial, de salud y ética. Estos tres pilares fluctúan dependiendo de los intereses de cada uno, pero, en líneas generales, el veganismo hace bien a todos los niveles. Es el futuro y es el presente.
La mejor manera de ahorrar recursos no es ni reciclar, ni apagar la luz cuando sales de la habitación, ni hacer duchas rápidas de 30 segundos. Todo eso lo mejoras de forma abrumadora acercándote a una dieta 100% vegetal. Por el camino tienes el flexitarianismo tan de moda últimamente y que mejora en gran medida la alimentación tradicional, muy apalancada en los productos de origen animal. Cualquier cambio en este sentido para mi es muy positivo.
DEFORESTACIÓN. La industria animal es la segunda responsable del calentamiento global y la principal causa de deforestación. El 80% de la deforestación del Amazonas, por ejemplo, se hace para expandir la tierra para agricultura de la industria cárnica
¿Somos conscientes del impacto que tiene sobre nuestra salud y emociones la forma en que comemos?
Nos empezamos a dar cuenta ahora. Tanto de las consecuencias que la alimentación tiene en el planeta (ya empieza a ser bastante obvio) como de la capacidad de influir directamente sobre nuestro comportamiento y nuestras emociones. Cuántas veces nos sentimos abrumados por una mala noticia y se nos cierra el estómago o sentimos dolor. O la típica frase: “Esta persona lo somatiza todo”. Pues bien, así es.
Hoy en día se sabe que existen más neuronas en los intestinos que en el propio cerebro y la gente habla del primer cerebro (el del estómago) y no del que está encima de los hombros. La psiconeuroinmunoendocrinología es una ciencia que va tomando protagonismo en los últimos años y que trata de dar respuesta a lo que los médicos raramente pueden explicar porque excede de su campo de acción. La superespecialización de la medicina hace que esta ciencia tome cada vez más protagonismo y que, sobre todo, arroje respuestas claras (y no metafísicas) a los problemas cotidianos de las personas.
¿En qué consiste la alimentación consciente? ¿Qué beneficios aporta la dieta plant based?
La alimentación consciente la definiría como la manera de alimentarte de una forma holística. ¿Y qué significa eso?… No sólo es comer lo que nos sienta bien y lo que nos hace ser la mejor versión de nosotros mismos física, mental y emocionalmente, sino que es la que tiene menor impacto en nuestro entorno. Creo que ya nos hemos pasado la pantalla del reciclaje, o por lo menos somos mucho más conscientes que hace 10 años, ahora toca la pantalla del uso de plásticos y el “malo final” de alimentarnos a favor de nuestro entorno y no en contra de él. Una alimentación lo más vegetal posible, teniendo en cuenta los productos de temporada y de proximidad, intentando consumir lo más local posible es el mejor ejemplo que les podemos dejar a nuestros hijos.
En las redes sociales proliferan las bondades del denominado ayuno intermitente. ¿Realmente es tan bueno y efectivo como dicen?
Como en todo, hay gente a la que le parece una herramienta metabólica fantástica. Y otra que lo demoniza. Yo te puedo hablar desde mi experiencia. El ayuno se ha utilizado desde que el hombre es hombre, la diferencia es que ahora lo utilizamos como herramienta depurativa y antiguamente era la norma, ya que el acceso al alimento no era tan fácil como lo es ahora. Lo que propone el ayuno intermitente es tener periodos largos de 12, 16 o 24 horas en los que el cuerpo no está procesando los alimentos y centra toda su energía en la reparación, depuración y las demandas intelectuales o físicas del día.
En mi caso fue liberador el hecho de comer sólo una vez al día, ya que evitaba parones que hacen que tu cuerpo empiece todo el proceso digestivo que ocasiona que tu energía caiga en picado. Eso sí, si sólo comes una vez, tiene que ser de la mayor calidad posible. Si te interesa este tema lo mejor es que lo consultes con algún especialista que adapte el ayuno intermitente a tu estilo de vida.
La mayoría de los trastornos alimenticios tiene que ver con conductas compulsivas. ¿Cómo se relacionan nutrición y salud mental?
Es un tema muy delicado y controvertido. El veganismo es sano, como toda conducta alimentaria si se hace bien, pero tratar temas de alimentación relacionados con la salud mental quizá sea más adecuado que responda un profesional médico.
En 2016 viajas a Estados Unidos para probar la ‘hamburguesa vegetal que sangra’. ¿Es el comienzo de Let it V?
Vi un video en YouTube de la empresa Impossible Foods que proponía una hamburguesa vegetal con un componente ‘heme’, que conseguía que supiese a carne de verdad. Lo que hacían era sintetizar la leghemoglobina de la soja, que es el análogo vegetal de la hemoglobina de la sangre. Eso pintaba muy bien, pero tenía que probarlo. Así que cogí un vuelo a Nueva York y me planté en un restaurante del East Village a probar el invento. Esa hamburguesa me voló la cabeza y fue el germen de lo que hoy es Let it V.
Se considera activista del sabor y de la experiencia. Sin pretender dar lecciones de ética ni de moral, su objetivo es ofrecer productos excelentes que cambien la percepción de los consumidores. ¿Es la base de Let It V Foods?
Es la punta del iceberg. Nuestra razón de ser tiene una base de sostenibilidad y ética, pero sin llegar a sentirnos activistas, sino impulsores del cambio. Nos interesa la gente que se plantea un nuevo estilo de vida, que sabe qué es más sano, que quiere hacer esa transición alimentaria, que sabe que la carne animal puede ser reproducida a nivel vegetal sin perder el sabor de siempre y ganando en sostenibilidad y salud. Es ahí a donde queremos llegar porque ellos son los que valoran el sabor y la experiencia. Nuestros productos no implican sacrificios y, además, contribuyen al estado de salud del planeta.
LET IT V FOODS. La startup barcelonesa desarrolladora de productos plant based arranca a mediados del 2021 con el propósito de crear una marca de productos diferenciales pensados para una alimentación consciente. Así nace Let It V Foods y su catálogo formado por los productos Veikon Kuidao, La Vuti, La VutiBurger y El Choree, que pretenden redefinir el concepto de la carne y que la opción plant based sea cada vez más inclusiva. Su misión es crear experiencias gastronómicas ricas, sostenibles y más saludables que las tradicionales.
¿Sabor e identidad contra los complejos de la carne vegetal?
Somos conscientes de que la carne vegetal está en un momento álgido. Hay muchas marcas con diferentes productos y muy buenos, pero hay otros que no lo son tanto y las papilas gustativas sufren. En Let it V Foods podemos presumir de tener un sabor tan especial y una textura tan conseguida que conseguimos diferenciarnos del resto. Vaya por delante que, entre nuestro público, los carnívoros son bienvenidos porque estamos seguros de que se sorprenderán.
En el pasado mes de septiembre lanzaron un beicon vegetal elaborado con aceite de girasol y proteína de guisante y ya hay hamburgueserías que reclaman su producto –Veikon Kuidao–. ¿En qué consiste esta experiencia sensorial y gastronómica? ¿Qué aceptación tiene?
Veikon Kuidao es nuestro principal producto y se trata de beicon a base de proteína de guisante y aceite de girasol alto oleico. Con esto, conseguimos una textura hiperrealista en comparación con el beicon de toda la vida ya que hemos desarrollado tres texturas prácticamente idénticas: carne, grasa y corteza. Además, al sacarlo del envase, el olor y la apariencia es muy similar y su forma de preparación es igual: sartén caliente, un poco de aceite, un par de vueltas y ya está. Veikon Kuidao está teniendo muy buena aceptación y seguimos trabajando para mejorar cada vez más la experiencia.
Afirma que ser healthy es una decisión personal, pero la salud del planeta tiene que ser una responsabilidad colectiva. ¿Los gobiernos y las autoridades sanitarias actúan en consecuencia?
No, claramente no. Hay muchos intereses que hacen que se mantengan las dinámicas de dinero y poder de la industria establecida. Recientemente nos estamos dando cuenta del impacto que tiene la alimentación en el planeta. La política y los gobiernos siempre van un paso por detrás de las tendencias. Claramente se van a tener que poner al día porque la solución pasa por hacer más eficiente la industria alimentaria y apalancarse lo menos posible en la industria de la proteína animal.
¿Son efectivas las etiquetas de bienestar animal o simplemente son una forma de greenwashing?
Es un tema delicado. Desde el punto de vista del bienestar, a lo largo de la vida del animal, está claro que la industria es la mayor interesada en que los animales estén bien cuidados y atendidos, ya que eso hará que sea mucho más productivo, pero no se trata al animal, se trata al producto que va a generar ese bienestar. El destino de ese animal bien cuidado sabemos todos cual es, y no es un concurso de belleza.
¿Los alimentos ultraprocesados son la gran epidemia del siglo XXI?
Yo creo que la epidemia es la falta de consciencia y de información veraz. En la era de Google es fácil encontrar información de cualquier tipo, pero difícil de encontrar la correcta o la que más te conviene. Si vives en este planeta, es muy probable que a lo largo del día comas varios alimentos procesados y ultraprocesados. Creo que la clave está en la prioridad que le das a estos alimentos en tu día a día. Es importante que la mayor parte de lo que comas en un día venga de productos frescos e idealmente de proximidad con toppings de algún procesado o ultraprocesado. De eso va a ser difícil escapar.
Están inmersos en su primera ronda de financiación. ¿Cuáles son los planes de futuro?
Así es, estamos intentando conseguir la primera ronda de 500K euros que nos va a ayudar a profesionalizar la compañía y posicionarnos como el beicon vegetal de referencia en España. Tenemos un plan nacional e internacional muy ambicioso, pero también sabemos que hay players muy buenos que están haciendo cosas muy interesantes y tenemos que creer mucho en lo que hacemos y en el producto que tenemos para conseguir los objetivos.