Kate Biberdorf es una mezcla explosiva: es doctora en química y con sobrados dotes artísticos. En las cadenas de televisión estadounidenses su cara es familiar y ¿cómo olvidarla? Realiza experimentos de manera amena, espectacular, asombrosa, por la tele. Confiesa que su propósito es llegar a los chicos y en especial a las chicas y atraerlos al mundo de la ciencia.
También conocida como ‘Kate, la química’, es comunicadora científica y profesora asociada de química en la Universidad de Texas en Austin. Se desempeña como Directora de Demostraciones y Difusión en la Facultad de Ciencias Naturales. Pero, en esencia, Biberdorf casi que transpira química a borbotones. Desea y transmite a pequeños y jóvenes el amor por el mundo de la ciencia como vocación de vida.
Desde la escuela secundaria comenzó a interesarse en fórmulas, sustancias, combinaciones. Las propiedades de la materia y de las transformaciones que estas experimentan al unirse.
Sus padres son psicólogos y atentos a sus curiosidades, la animaron a probar diferentes experimentos en casa y poco a poco, la fueron dotando de un pequeño laboratorio. También su formación estuvo marcada por la entusiasta profesora Kelli Palsrok. “Honestamente, desde que tenía 15 años, supe que quería ser químico gracias a ella”, dijo Biberdorf.
Además, Kate disfrutaba viendo a William Sanford “Bill” Nye, popularmente conocido como Bill Nye the Science Guy. Y quería convertirse en la próxima científica televisiva de Estados Unidos. Lo tenía claro.
“Cuando estoy más feliz es cuando estoy en el escenario compartiendo lo que amo”, dijo, tras compartir sus nuevos proyectos. “Estoy pensando en un gran espectáculo, como los de magia de larga duración de David Copperfield en MGM Grand o Penn & Teller en Rio Las Vegas. Si podemos convencer a la gente que vaya a espectáculos científicos en vacaciones, sería un rotundo éxito”.
Kate Biberdorf, la química explosiva
‘Kate la química’ se multiplica en sus ocupaciones. También enseña química general y alfabetización científica a clases de quinientos estudiantes. Creó el programa ‘Fun with Chemistry’, que introduce a los estudiantes de primaria, secundaria y preparatoria a los experimentos de química. El programa llega a más de 16.000 estudiantes cada año.
Fuera de su función docente en la Universidad de Texas en Austin, Kate Biberdorf elaboró una serie de espectáculos de química llamada ‘Puking Pumpkin Tour’, que realizó en el Festival de Ciencia e Ingeniería de Estados Unidos.
Asimismo, presentó un espectáculo científico en la Conferencia de Liderazgo de la Universidad Simmons. Y entregó un TEDxDetroit ideando un ejército de mujeres STEM en 2018. Ese año, BuzzFeed la seleccionó como una de las mejores mujeres científicas del mundo y fue incluida en Smart Girls de Amy Poehler. Ella aparece regularmente en los medios. Incluso en Great Big Story, The Wall Street Journal, el programa Today, The Late Show con Stephen Colbert, el programa de Wendy Williams y CBS.
Pero el campo de la química tiene sus particularidades. “Te juzgan por tu apariencia”, indicó a The New York Times. “Y me veo y me visto de cierta manera”. Es decir, usa tacones, faldas y pintalabios. “Me inclino hacia mi lado femenino”, comentó. “Pero eso es solo porque me gusta, y siento que estoy en mi mejor momento cuando presento esa imagen”.
También, complementó, “es muy importante para mí que las niñas más jóvenes puedan ver ese lado de un científico”. Confió que las mujeres que toman su clase universitaria han expresado su agradecimiento por lo que enseña.
“Puedes lucir como quieras y seguir interesado en la ciencia tanto como sea posible”, añadió. Pero eso no encaja con el estereotipo que muchos científicos tienen de las mujeres como científicas.
Enseñar, cautivar y arrimar a más jóvenes a la ciencia
Como estudiante de posgrado en la Universidad de Texas, estudió catalizadores para acelerar potencialmente el acoplamiento Suzuki-Miyaura. Una reacción comúnmente utilizada en la fabricación de productos farmacéuticos.
Allí descubrió que no le gustaba el trabajo de laboratorio. Además, la academia pura era un lugar difícil para ella. “Yo no quería estar en ese ambiente. Quería salir de allí lo más rápido que pudiera”.
Su trabajo actual en la universidad es como profesora de instrucción: toda enseñanza y ninguna investigación de laboratorio. En 2014, cuando comenzó, estaba enseñando dos clases de química de pregrado y fue a ver a su jefe para preguntarle si podía hacer más.
“Creamos un programa de divulgación llamado ‘Diversión con la química’. Se suponía que debía ir a dos escuelas primarias por semestre. Ese era el trato”. A partir de allí las cosas se fueron tornando más favorables para sus propósitos de enseñar a los jóvenes.
El programa se convirtió en algo mucho más popular, con muchas más escuelas que le pedían que visitara. “Interactué con algo así como 16. 000 estudiantes ese primer año. Fue una locura, en mi opinión”. Eso, a su vez, condujo a apariciones mensuales en “We Are Austin”, un programa matutino en la estación local de CBS.
Unos años más tarde, a miles de kilómetros de distancia en Los Ángeles, Glenn Schwartz se dio cuenta de Kate Biberdorf, la doctora en química incorporada al mundo del saber y el espectáculo. Schwartz había sido el publicista de Bill Nye, pero los dos se separaron hace unos cinco años. Schwartz se preguntó: ¿Hay otro Bill Nye por ahí?
El fascinante mundo de la ciencia en la tele
Buscó durante aproximadamente un año antes de encontrarse con Biberdorf. “Encontré el sitio web de Kate, miré un video y simplemente la contacté”, recordó Schwartz. “Realmente, era yo mirando alrededor y buscando a alguien como ella. Y luego tuve la suerte de encontrarla”.
Schwartz, quien ahora es el manager de Kate, dijo que ella poseía una combinación ganadora de credenciales y personalidad. Aunque hay muchas personas que publican videos científicos en YouTube, “Kate obviamente era diferente”, destacó.
A Bill Nye the Science Guy no le importa compartir el centro de atención de la televisión científica. “Kate será Kate y Bill será Bill”, dijo en una entrevista. Y aseguró que sus objetivos eran los mismos: intrigar a los niños en la ciencia. Nye también sigue en la televisión. Su última serie, ‘The End Is Nye’, se estrena en el servicio de transmisión de Peacock el 25 de agosto.
La ciencia en la televisión ha requerido un tipo de investigación muy diferente de los experimentos de química, de acoplamiento Suzuki-Miyaura que solía llevar a cabo Kate Biberdorf. Por ejemplo, tuvo que averiguar cómo inflar un pastel en “The Wendy Williams Show” el año pasado para celebrar el cumpleaños del presentador.
Por seguridad, el fuego, los tipos habituales de explosivos y productos químicos tóxicos no estaban permitidos en el estudio. ”¿Entonces qué hice?” relató Kate. “Tomé nitrógeno líquido, lo puse en una botella de refresco y lo puse en una cosa, y explotó de esa manera. que es una bomba. Pero ellos no saben eso. Así que simplemente no usamos esa terminología. Dije que es la presión de vapor. Pero es una manera de girar eso, ¿verdad? Tienes que descubrir cómo decir las cosas para no asustar a la gente”.
Tele, espectáculos y libros
Después de un año y medio de enseñanza remota debido a la pandemia, regresó a la sala de conferencias en el semestre de primavera.
Kate Biberdorf está planeando una gira itinerante de espectáculos de química el próximo año, realizando sus experimentos y entretenimiento científico en centros de artes escénicas de todo el país.
“Solo estamos tratando de averiguar la logística en este momento”, adelantó. Para una demostración como la explosión del pastel de cumpleaños, “¿Cómo puedo llevar eso de un lugar a otro?¿Estoy reconstruyendo mi pastel de cumpleaños explosivo cada vez, o qué puedo reutilizar?”, preguntó.
Si el entusiasmo de los programas puede intrigar al público, espera que la gente pueda profundizar en sus libros, donde puede brindar explicaciones más detalladas de lo que enseña en la tele. Y aún así hacer que la química sea interesante para las personas que aún no están familiarizadas con la jerga.
Biberdorf está escribiendo una serie de libros de ciencia para niños con Penguin Random House. Y ‘Kate the Chemist: The Big Book of Experiments’ incluye experimentos científicos para que los niños los prueben en casa.