Por Cambio16
20/11/2017
La Guardia Civil ha intervenido en Almería dos fusiles AK47, los populares Kalashnikov. Las armas le han sido requisadas a un hombre de 51 años de edad y vecino de El Parador de las Hortichuelas-Roquetas de Mar (Almería). Él ha sido detenido como presunto autor de un delito de depósito de armas de guerra y munición.
Los Kalashnikov tenían culata retráctil sin marca ni número de fabricación. Y el arrestado tenía 12 cargadores aptos para estos fusiles. También dos silenciadores acoplables; un arma corta simulada y un silenciador para un arma calibre 10 mm. Así como dos cargadores, uno para un arma calibre 10mm y otro para un arma calibre 22mm; 5 grilletes metálicos y cerca de 800 cartuchos. Todas las armas carecen de marca, modelo y punzones de fabricación.
El detenido cuenta con numerosos antecedentes por delitos contra la salud pública. Y también de amenazas y coacciones, falsificación de documento y atentado a agente de la autoridad. El hombre tenía este arsenal oculto en su domicilio. Y se encontraba huido de su domicilio cuando se realizaron los registros. Por ello, fue localizado en la ciudad autónoma de Melilla.
Las armas incautadas están siendo estudiadas para averiguar su posible relación con algún hecho delictivo. Y la Guardia Civil mantiene la operación abierta para esclarecer el origen, destino o uso final que se pretendía dar a este arsenal.
Riesgo por el terrorismo internacional
El tráfico ilícito de este tipo de armas de guerra tiene una procedencia variada. Unas suelen proceder del conflicto bélico de la antigua Yugoslavia y otras provienen del mercado negro internacional que mantienen los países que tienen licencia para su fabricación.
Este tipo de armas supone un riesgo elevado para la seguridad ciudadana en caso de caer en manos de organizaciones criminales, especialmente, en aquellas vinculadas al terrorismo internacional.