El exvicepresidente del gobierno catalán y líder de la formación independentista ERC, Oriol Junqueras, ha anunciado que pretende encabezar la lista del partido republicano a las elecciones europeas del próximo mes de mayo.
«Presentarme a las elecciones Europeas es la mejor manera de denunciar el retroceso democrático y la represión del Estado español», dijo el político, que se encuentra en prisión a la espera de juicio desde hace casi un año procesado por presuntos delitos de rebelión y malversación en el marco de la declaración unilateral de independencia de la región.
«Quiero seguir luchando, como lo he hecho siempre, por la libertad de mi país. Quiero defender mis derechos políticos y los de todos los represaliados, que es lo que nos quieren arrebatar, y por eso he decidido presentarme a las elecciones europeas», señala en una carta a la militancia hecha pública a través de la página web de su partido la víspera del aniversario del referéndum considerado ilegal por los tribunales que propició la declaración unilateral de independencia y una intervención histórica de la región.
«Estamos a las puertas del 1-O, el día que lo cambio todo, el día que el pueblo y las instituciones hicieron conjuntamente posible el referéndum de autodeterminación que nos dijeron que sería imposible».
En la misiva, el líder catalán explica que el objetivo de su candidatura es internacionalizar «la causa de la libertad de Cataluña«.
Marchas encontradas
En el centro de Barcelona varios miles de personas se concentraban el sábado para reclamar la libertad de Junqueras y otros dirigentes considerados «presos políticos».
Entre los actos convocados, asociaciones y fuerzas independentistas llamaron a los manifestantes a la Plaza de Sant Jaume para tratar de impedir un acto de homenaje a los agentes de la Policía Nacional y la Guardia Civil que participaron el año pasado en el polémico dispositivo para evitar la celebración de la consulta prohibida por los tribunales y que finalmente tuvo que modificar su recorrido.
A lo largo de la mañana se produjeron enfrentamientos puntuales entre las dos concentraciones, con momentos de tensión que las fuerzas de seguridad regionales contuvieron con pequeñas cargas y algunos medios reportando detenciones.
Los manifestantes proindependencia lanzaron pintura y polvo de colores a los Mossos d’Esquadra mientras coreaban gritos de apoyo a los presos: «Vuestro consejero está en prisión», decían algunos en relación a Joaquim Forn, el ex consejero de Interior que se encuentra también arrestado en espera de juicio.
«El año pasado vivimos uno de nuestros mejores momentos, ví a mis padres llorar de alegría de poder votar y ahora estamos atascados», explica Nacis Termes, un electricista de 68 años que participa en la manifestación independentista junto a su esposa.
Mientras graba la manifestación de apoyo a la Policía Nacional y a la Guardia Civil con su móvil, Joan Puig, maquinista de 42 años, culpa a los políticos por el enfrentamiento social: «La cuerda cada vez se está tensando más, la culpa no la tienen ellos ni nosotros, la tienen los políticos».