Había tardado en aparecer, pero el miércoles la lluvia llegó con fuerza a París e interrumpió la segunda jornada de cuartos de Roland Garros, cuyos partidos fueron suspendidos y se jugarán hoy jueves. Una reprogramación de lo que no es ajena la organización del torneo, acostumbrada al asedio de la lluvia año tras año.
El Simona Halep-Amanda Anisimova y el Madison Keys-Ashleigh Barty, que teóricamente se jugaban a las dos de la tarde, fueron retrasados hasta las 4:00 de la tarde, momento en el que se decidió la suspensión definitiva de la jornada. Tampoco se jugaron los encuentros de cuartos entre Novak Djokovic y Alexander Zverev ni el Thiem-Khachanov.
Hoy, la jornada de cuartos de Roland Garros comenzará a partir de las 12 del mediodía, con los dos primeros partidos, mientras que los segundos no empezarán antes de las 14:30. El Halep-Anisimova y el Djokovic-Zverev tendrán lugar en la Philippe Chatrier, el Keys-Barty y el Thiem-Khachanov se jugarán en la Suzanne Lenglen.
La reprogramación de la jornada afecta tanto a las jugadoras que se clasifiquen mañana como a Konta y Vondrousova, que ya pasaron ayer, porque sus semifinales se jugarán el viernes, un día antes de la gran final. En el cuadro masculino, también pierden un día de descanso antes de las semifinales del viernes. Los que salen “airosos” serán Roger Federer y Rafael Nadal, porque el que pase tendrá un día de descanso más que su competidor.
El español, por su parte, tenía programada una práctica a las 12 en la pista 29 del complejo Jean Bouin, que se encuentra anexado a las instalaciones del torneo, pero no pudo tenerla. Las previsiones esperan que hoy no haya lluvias, pero que podrían volver el viernes.
Reembolso de las entradas
Por otra parte, al torneo también le saldrá caro la reprogramación pues reembolsará el dinero de las entradas, que para jornadas de cuartos de final se cobran a partir de 85 euros por persona. Asimismo, las personas que tenían entradas para los partidos de hoy podrán entrar mañana sin cobro.
Ya la organización del torneo viene trabajando desde hace apróximadamente un año en el techo retráctil de la cancha principal, la Philippe Chatrier, para evitar este tipo de inconvenientes. Sin embargo, el proyecto se ha retrasado y se espera que el año que viene esté listo. Ya se han invertido 380 millones de euros en la remodelación.
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