Por Cambio16
26/07/2018
McLaren ha fichado al inglés James Key como nuevo director técnico. El equipo de Woking confirmó la noticia este jueves desde el circuito de Hungaroring, sede del Gran Premio de Hungría.
Quien fuera el director técnico de Toro Rosso desde 2012 se une a la segunda escudería más laureada de la Fórmula 1, la cual vive un pleno proceso de reestructuración. Su llegada también supone la salida del inglés Matt Morris, responsable de ingeniería desde 2013.
En los últimos meses, McLaren había empezado un movimiento de personal con el objetivo de volver a la élite. En abril salió Tim Goss, director técnico, y a principios de julio, se fue Eric Boullier, su director. Después de tres años en un muy bajo nivel, el equipo de Fernando Alonso y Stoffel Vandoorne se encuentra de séptimo en el Mundial de constructores (48 puntos) y octavos en el de pilotos, con 40 puntos conseguidos por el asturiano.
Sin embargo, la incorporación de Key al equipo inglés todavía no podrá hacerse efectiva pues debe estar ausente de la Fórmula 1 por un período de exención laboral. El mismo, conocido como “permiso de jardinería”, dura casi siempre un año pero puede ser menos si las dos partes llegan a un acuerdo.
En las negociaciones un nombre clave podría ser el de Lando Norris. Según informan diversos medios, el equipo británico ya había bloqueado la marcha del piloto de 19 años a Toro Rosso. Sin embargo, parece poco probable que McLaren deje ir a su gran futura promesa.
Perfil de James Key
Key, de 46 años, es licenciado por la Universidad de Nottingham. Entró a la Fórmula 1 en 1998, de la mano de Eddie Jordan, antes de que la escudería se convirtiera en Midland, Spyker y finalmente Force India, cuando asumió la dirección técnica.
En el 2010, fichó por Sauber y fue clave para que la escudería se recuperara tras las marcha de BMW. En 2012, logró tres podios cuando sus cohes incorporaron nuevos motores Ferrari. El inglés, ya por esa época, se ganó el reconocimiento como “maestro de la eficiencia” pues destacaba por su capacidad de aprovechar los recursos y sacarles el máximo.
Con Toro Rosso, también fue capaz de poner a un nivel aceptable un equipo de los modestos. Ahora, en McLaren, el ingeniero tendrá la oportunidad (y el reto) de devolver a la escudería británica el caché perdido.