Por Cambio16
26/8/2017
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El ejercito iraquí, en conjunto con la policía y las fuerzas de las Unidades de Movilización Popular están a punto de tomar el control total de Tal Afar, bastión del Estado Islámico en el noroeste de Irak, en una ofensiva rápida contra los militantes exhaustos, según un portavoz militar iraquí.
El rápido colapso del Estado Islámico en Tal Afar, campo de cultivo para los grupos yihadistas en Irak, confirmó informaciones del ejército iraquí de que los militantes carecen de estructuras de mando y control en las zonas al oeste de Mosul.
Combate en Tal Afar
Se creía que hasta 2.000 militantes defendían Tal Afar cuando comenzó el pasado 20 de agosto la ofensiva respaldada por EE.UU. para recuperar la ciudad. Se estimaba que las fuerzas atacantes contaban con 50.000 soldados, según fuentes miltares occidentales.
«La ciudad de Tal Afar está a punto de caer completamente en las manos de nuestras fuerzas, sólo el cinco por ciento permanece bajo el control del Estado Islámico«, dijo un portavoz militar a Reuters.
“Si Dios quiere, la parte restante será liberada pronto”, dijo anteriormente el ministro de Exteriores iraquí, Ibrahim al-Jaafari, en una rueda de prensa con su homólogo francés, Jean-Yves Le Drian, y el ministro francés de Defensa, Florence Parly, en Bagdad.
Tal Afar se encuentra en la ruta de suministro entre Siria y la antiguo bastión del Estado Islámico en Mosul.
Las tropas de élite de la lucha antiterrorista “liberó el barrio colindante a la ciudadela .. y levantó la bandera iraquí en la parte superior del edificio de la ciudadela,”, dijo el comando de operaciones conjuntas iraquíes en una nota.
Gran parte de la ciudadela de la época otomana fue destruida por los militantes del Estado Islámico a finales de 2014.
Tal Afar, que contaba antes de la guerra con una población de unas 200.000 personas, es el último objetivo en la ofensiva respaldada por EE.UU. contra el Estado Islámico tras la reconquista de Mosul.
La caída de Mosul marcó en efecto el final del autoproclamado «Estado califato» declarado en partes de Siria e Irak en 2014.
Cuando comenzó la ofensiva contra Tal Afar solo quedaban entre 10.000 y 20.000 civiles en la ciudad, según estimaciones del ejército estadounidense.