La humanidad enfrenta muchos desafíos. Uno de ellos, la pandemia que aún reporta inesperados índices de contagios y, la crisis climática. Pero, en el último Índice de Progreso Social (SPI) se afirma que las condiciones de vida en general están mejorando en la mayoría de los países del mundo. Señala el informe 2021 que gran parte de ese avance se debe a un mayor acceso a la información y las comunicaciones. Otros indicadores muy mejorados incluyen agua y saneamiento, vivienda y educación avanzada.
El SPI analiza 168 países. Desde 2011, los investigadores responsables del índice para dar un puntaje para cada nación han utilizado indicadores clave, como la calidad de la atención médica, la seguridad personal, el acceso a la educación, así como el acceso a la tecnología, los derechos y la calidad del medio ambiente.
La clasificación de la organización Progreso Social Imperativo está basada en los conceptos de los economistas Amartya Sen, Douglass North, y Joseph Stiglitz. En esta nueva edición, se señala a Noruega como el país más progresista del mundo, seguido por Finlandia y Dinamarca. El Reino Unido ocupó el puesto 18, y Estados Unidos el 24.
En general, 147 naciones registraron una puntuación mejor que hace una década. Y solo cuatro países (EE UU, Brasil, Siria y Sudán del Sur) registraron una puntuación peor. “El progreso social avanza en todo el mundo. Pero sigue siendo lento y desigual», señala el informe
A pesar del panorama general del progreso, los autores encontraron que el mundo está disminuyendo significativamente en los derechos personales. 116 de los 168 países cubiertos por el índice han visto retroceder los derechos individuales desde 2011. “Si bien no es universal, esta tendencia es evidente en todas las regiones y niveles de desarrollo social y económico”, sostiene.
Detalles del Índice de Progreso Social
Los investigadores, de manera alentadora, observaron que la relación entre el progreso social y las emisiones se está debilitando. Una prueba de que la sostenibilidad no significa un compromiso en la calidad de vida.
“Hay países que han sido altamente efectivos para mejorar los niveles de vida mientras emiten niveles más modestos de emisiones de gases de efecto invernadero. En comparación con otros países de ingresos más altos que se están desarrollando a expensas del medio ambiente”, precisa el Índice de Progreso Social.
Suecia, Costa Rica y Ghana se destacaron por emitir niveles relativamente bajos de estos gases. Además que superaron a los grandes emisores como Estados Unidos en muchos aspectos del progreso social.
“Es menos probable que niveles más altos de progreso social indiquen emisiones más altas en 2021, que hace once años”, agrega el informe.
Otro tema de conversación del índice es el vínculo débil entre el desarrollo económico y el progreso social. En ese sentido, los investigadores sugieren plantear más preguntas sobre los méritos de utilizar el PIB para medir el éxito social. “El aumento de los ingresos generalmente trae consigo mejoras importantes en áreas como el acceso al agua potable, el saneamiento, la alfabetización y la educación básica”, informó el índice. «Pero, en promedio, la seguridad personal no es mejor en los países de ingresos medios que en los de ingresos bajos y, a menudo, es peor».
Asimismo precisa que “demasiadas personas, independientemente de sus ingresos, viven sin plenos derechos y sufren discriminación. O incluso violencia por motivos de género, religión, etnia u orientación sexual. Las medidas tradicionales del ingreso nacional, como el PIB per cápita, no capturan el progreso general de las sociedades».
EE UU muestra varias debilidades
El Índice de Progreso Social no arroja buenas noticias para EE UU. Esta potencia registra declives en la seguridad y los derechos personales, la inclusión, la vivienda y la salud y el bienestar. El país ocupa el puesto 24 en el mundo en progreso social, entre Italia y Portugal. Y probablemente no le agradará saber que está por debajo de Cuba y Uzbekistán en el indicador de acceso a conocimientos básicos.
Se detectaron grandes avances, por sus elevados puntajes, en Noruega, Finlandia, Dinamarca, Islandia, Suiza, Canadá, Suecia, Países Bajos, Japón y Alemania. Los más mejorados son Fiji, Sri Lanka, Emiratos Árabes Unidos, Túnez, Uzbekistán, Bután, Etiopía, Sierra Leona, Eswatini, Gambia y Myanmar. Sus puntuaciones subieron más o menos diez puntos cada uno.
Mientras tanto, España aparece en el número 20 con 87,53 puntos, cuatro puestos por encima de EE UU. Arabia Saudí está en el puesto 105, tres peldaños por arriba de Nicaragua.
El estudio abarca otros aspectos de interés en la lucha contra el cambio climático. “Podemos inspirarnos un poco en Hawai”, dice el miembro de TPN Fareed Zakaria. En 2008, Hawai dependía en un 90% del petróleo para obtener energía. Hoy, el estado genera el 34,5% de su electricidad a partir de fuentes limpias.
Asimismo el informe hace referencia al comienzo de la Era EV. La transición a los vehículos eléctricos está sobre ruedas. Para no ser superada por Noruega, Grecia ha introducido una ley, que se espera que sea aprobada, que prohibirá la venta de nuevos automóviles con motor de combustión a partir de 2030.
En Ruanda, donde los mototaxis son populares. Un pequeño número de conductores está probando motocicletas eléctricas. Una empresa emergente de ese país, Ampersand, está detrás del cambio. Esperan que casi todas las motos sean eléctricas en cinco años.