El Departamento de Protección Ambiental de Maine (MDEP) otorgó permiso final para que la filial de Iberdrola en los Estados Unidos construya y opere una nueva línea de alta tensión que permitirá importar energía desde Canadá a la región de Nueva Inglaterra.
La inversión del proyecto, liderado por Avangrid, es de 950 millones de dólares (unos 770 millones de euros) y refuerza la posición de Iberdrola en los Estados Unidos.
La autorización confirma que el proyecto ha cumplido o excedido todos los estándares ambientales establecidos y que ninguna otra ruta alternativa representaría una mejora en el diseño actual del proyecto.
«La decisión del MDEP de permitir el avance del New England Clean Energy Connect representa otro paso significativo para este proyecto y es la culminación de un proceso riguroso que comenzó hace más de dos años», dijo Thorn Dickinson, CEO y presidente de NECEC Transmission LLC. «Esperamos trabajar con el Comisionado y su personal para cumplir con las condiciones descritas».
After learning the facts about the project, more and more Mainers are saying #CountMeIn for the Clean Energy Corridor! #maine #mepolitics pic.twitter.com/0a8YEQY3m5
— New England Clean Energy Connect (@NECEC_ME) May 13, 2020
New England Clean Energy Connect
La electricidad que se distribuirá por la red provendrá de fuentes de energía limpia, como la eólica e hidráulica. La línea de interconexión tendrá una distancia de 230 kilómetros. Será construida por Central Maine Power y su matriz Avangrid. Tendrá capacidad para importar 1.200 megavatios de electricidad.
Se espera que el proyecto, bautizado New England Clean Energy Connect (NECEC), genere 1.600 empleos durante su construcción. Hasta 46 empresas compitieron por este contrato de transmisión de 20 años de vigencia.
El objetivo es garantizar que los distribuidores de electricidad en la región cuenten con un mayor acceso a energía renovable para así cumplir con los nuevos requisitos medioambientales.
Operará a finales de 2022
La construcción del proyecto arrancará en cuanto se reciban los permisos ambientales finales. Se prevé que será para este segundo trimestre de 2020. El objetivo de que esté terminado y operativo en diciembre de 2022.
La parte del trazado en Canadá correrá a cargo de su socia Hydro-Québec, una de las principales generadoras y distribuidoras del país. Con el visto bueno de los reguladores en Massachusetts, solo queda como trámite la autorización federal, algo que se espera para los próximos meses.
La idea es que la nueva línea utilice gran parte de un trazado existente para reducir costes y la oposición de los residentes en la zona.
Este visto bueno final al proyecto incluye varias condiciones adicionales que deben ser cumplidas. Entre ellas figura la reducción del ancho del corredor de uno de los segmentos a 54 pies, desde los 150 pies inicialmente planteados. También requiere un plan de conservación diseñado para compensar los efectos de la fragmentación del corredor. Esto permitirá dar prioridad a la conservación de grandes bloques de tierra y promover la conservación del hábitat de los bosques maduros.
“The decision by the MDEP to permit the New England Clean Energy Connect represents another significant step for this project and is the culmination of a rigorous process that began more than two years ago” https://t.co/4uT8sdnZbD #Maine #mepolitics
— New England Clean Energy Connect (@NECEC_ME) May 11, 2020
Energía limpia
El proyecto proporcionará 200 millones de dólares en actualizaciones a la red de energía de Maine, haciendo que el servicio de electricidad de ese estado sea más confiable.
Su puesta en marcha permitirá que más productores de energía renovable en esa región obtengan su energía en la red, y debido a que el proyecto del corredor utilizará energía hidroeléctrica limpia, reducirá el uso de combustibles fósiles. También se minimizará en tres millones de toneladas métricas las emisiones sucias cada año.
Este el segundo gran proyecto para importar energía desde Canadá a los Estados Unidos que lidera Iberdrola, a través de su filial Avangrid. La compañía ya culminó en 2015 la construcción del proyecto Maine Power Reliability Program (MPRP), otra línea de 800 kilómetros, que opera desde hace tres años, en el marco de un proyecto que tuvo una inversión de 1.400 millones de dólares (unos 1.294 millones de euros) que reforzó el intercambio de electricidad entre los dos países.
Oposición al proyecto
Sin embargo, los críticos del proyecto obtuvieron suficientes firmas para someterlo a referéndum en todo el estado en noviembre.
La empresa está demandando por la constitucionalidad de dicha consulta, destinada a revocar las decisiones de tres agencias estatales que aprobaron el proyecto.
Quienes se oponen al NECEC dicen que los beneficios ambientales son exagerados y que el proyecto arruinaría parte de North Woods en Maine. Igual sostienen que la oferta de electricidad podría obstaculizar proyectos más pequeños de energía renovable en el estado.
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