Houston se está convirtiendo a pasos agigantados en un punto de referencia global de tecnología limpia. El principal centro energético de Texas se está expandiendo rápidamente hacia el mundo de las energías renovables con el respaldo de una amplia gama de empresas que invierten en tecnologías verdes innovadoras.
La ciudad se está diversificando del petróleo y el gas y está ganando reputación como un centro energético integral. Muchos abandonan California para trabajar en el floreciente mercado de Houston.
Alrededor del 34% de las compañías de hidrocarburos que cotizan en bolsa en EE UU tienen su sede en Houston. Una ciudad conocida desde hace mucho tiempo porque varias de las grandes empresas de combustibles fósiles operan desde Texas, ahora inversores y empresas de transición energética están estableciendo su sede operativa. Houston tiene una gran ventaja. Con más de 230.800 trabajadores tecnológicos, un tipo de empleo que sigue en crecimiento, alberga la fuerza laboral de ingeniería más grande de EE UU.
Es una de las 5 principales ciudades para invertir en empresas centradas en iniciativas ambientales, sociales y de gobierno corporativo (ESG). En 2022, contribuyó con más de 1.250 millones de dólares a ese modelo de gestión.
También es importante para el mundo académico. Posee 21 centros de investigación empresarial dedicados a la transición energética. Varias instituciones de educación superior, como la Universidad Rice y la Universidad de Houston, desarrollan programas de emprendimiento y otros títulos que alientan a los jóvenes a poner en marcha sus propias ideas comerciales innovadoras.
La Universidad de Houston tiene como objetivo lanzar su Centro de Innovación en 2025 y ha estimulado el desarrollo de una gran cantidad de nuevas empresas de tecnología limpia y energía verde. Ahora se considera a Houston como la gran palanca de transición energética de EE UU.
Houston abre paso a la tecnología limpia
Houston al abrirse a empresas de tecnología limpia ha atraído en 5 años más de 6.000 millones de dólares en capital de riesgo. En Houston tienen cabida Silicon Valley y el mundo espacial. Asimismo, esta populosa ciudad forma parte fundamental en la exploración espacial con el Centro Espacial Lyndon B. Johnson de la NASA y de la industria automovilística con Tesla a la cabeza.
El compromiso de Houston con la sostenibilidad es evidente. Trabaja efectivamente en su transición a la energía renovable para las instalaciones municipales y mantiene ambiciosas metas para lograr la neutralidad de carbono para mediados de siglo. Y sobre todo, aloja más de 80 organizaciones de desarrollo de startups, desde incubadoras hasta aceleradoras, espacios de creadores, espacios de coworking, organizaciones sin fines de lucro e instituciones académicas.
La ciudad impulsa la innovación a través de proyectos colaborativos y del trabajo tradicional de las empresas energéticas privadas. Están surgiendo lugares como The Ion para ofrecer a las startups el espacio para desarrollar ideas. Establecido en 2021, The Ion acoge 300 empresas y proporciona financiación para la formación laboral y la reserva de talentos del sector tecnológico.
En sitio en internet aparece a Saudi Aramco. La mayor productora de petróleo y gas del mundo. Produce el 10 % de todo el petróleo a nivel global (10 millones de barriles de petróleo al día), y en 2022 sus beneficios alcazaron 153.130 millones de euros.
Empresas solares y eólicas en Houston
En el cambio de ruta Houston, de ser una ciudad petrolera convertirse en un centro para que las empresas operen y se dediquen a la investigación y desarrollo de tecnología limpia, tiene un papel importante Greentown Labs. Una comunidad de pioneros de la acción climática que trabajan para diseñar un mundo más sostenible.
Es la incubadora de startups de tecnología climática más grande de América del Norte. Greentown Labs reúne startups, corporaciones, inversores, formuladores de políticas y muchas otras propuesta enfocadas en ampliar las soluciones climáticas.
Wogbe Ofori, fundador de la firma de desarrollo de riesgo Wrx Companies, cree que la orientación de la ciudad hacia la tecnología dura la diferencia de otros centros tecnológicos. “Tenemos mucho potencial para abordar problemas a escala industrial, no solo a escala de consumo. Houston tiene la gran opción de ser un centro global para la innovación en tecnología limpia. El mundo vendrá a Houston a resolver sus problemas más difíciles», pronosticó.
Houston predica con el ejemplo. Emprendió su propia transición e impulsa la tecnología limpia. Si bien no ha roto con la industria del petróleo y el gas, está desarrollando importantes proyectos verde. Desde 2020, las instalaciones municipales de Houston funcionan íntegramente con energía renovable y toda la ciudad espera alcanzar la neutralidad de carbono para mediados de siglo.
Es un destino importante para las empresas solares y eólicas, hogar de más de 130 empresas. Su objetivo es establecer la primera red sin emisiones de carbono en Estados Unidos.
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