Durante la Semana de la Innovación de IRENA, se ventiló la última perspectiva tecnológica de la agencia: Hidrógeno a partir de energía renovable. El documento describe el papel fundamental que podría desempeñar el hidrógeno en una transición energética más profunda.
De hecho, estiman que puede ser la clave para superar con éxito el desafío de reducir las emisiones de uso final, dice un reporte de la organización.
Y, aunque el hidrógeno ya se usa ampliamente en instalaciones como plantas químicas y refinerías, al cambiar el combustible utilizado de hidrocarburos a electricidad renovable, puede convertirse en un portador de energía renovable; complementando el papel solar y eólico en la producción de energía.
IRENA cree que más de 1.000 millones de vehículos eléctricos pueden estar en carreteras en 2050 seguros para el ambiente. Se trata de electrificar el transporte. Sin embargo, los edificios y la industria son menos viables, lo que obstaculiza el papel de la energía renovable en estos sectores.
A medida que el mundo se esfuerza por reducir las emisiones; la generación de energía a partir de fuentes renovables se ha convertido en un líder en la transformación de energía con bajas emisiones de carbono.
Hoy en día, las energías renovables representan alrededor de una cuarta parte de la generación de energía mundial; y 167 GW (más que la capacidad total de electricidad instalada de Brasil) en 2017. Sin embargo, el papel de la energía renovable en sectores como el transporte y la industria está rezagado.
Hidrógeno a partir de energía renovable, una opción de transición
Y ¿por qué el hidrógeno podría ser clave? IRENA reseña que no existe una opción económicamente viable para reducir las emisiones de carbono producidas por alrededor de un tercio del sector energético.
Los combustibles fósiles siguen siendo fundamentales para las prácticas de transporte e industriales, desde la aviación hasta la refinación, donde la electrificación no es adecuada. Esto podría hacer que el hidrógeno de la energía renovable sea el eslabón perdido en la transformación del sistema energético global.
El Hidrógeno a partir de energía renovable puede soportar una mayor participación de la energía eólica y solar en los sectores eléctricos de todo el mundo. El exceso de potencia variable (que es la energía producida por proyectos eólicos intermitentes y solares) ahora puede dirigirse a la producción de hidrógeno y utilizarse en el transporte, la industria o la inyección de la red de gas.
Utilizado de esta manera, el hidrógeno se convierte en una fuente de almacenamiento para la electricidad renovable; mantiene el sistema de energía flexible y ayuda a equilibrar la red.
Vehículos a base de hidrógeno son toda una realidad
El hidrógeno ofrece posibilidades de aprovechar recursos de energía renovable de alta calidad. A menudo, los mejores recursos solares y eólicos se encuentran lejos de los usuarios finales en las ciudades y los principales centros urbanos. El hidrógeno, una vez producido, puede ser transportado en tierra (como el gas natural licuado) como un producto global no restringido por las conexiones a la red.
Puede aprovechar la infraestructura de energía existente. Hasta cierto punto, el hidrógeno se puede inyectar en las redes de gas natural, reduciendo las emisiones de la infraestructura de gas existente, como las turbinas de gas para el sector eléctrico.
Alimentados por hidrógeno, los vehículos eléctricos de celda de combustible (FCEV) ofrecen a los consumidores un rendimiento de conducción de baja emisión similar a un vehículo convencional cuando se produce hidrógeno a partir de energía renovable. Los vehículos con células de combustible pueden complementar los vehículos eléctricos, superando las limitaciones de peso, alcance y carga asociadas con los vehículos eléctricos.
El hidrógeno puede convertirse en un factor clave para un futuro potencial de 100% de energía renovable. Para llegar allí, sin embargo, las reducciones de costos son necesarias y solo posibles a través de economías de escala.
Con las políticas habilitantes y marcos regulatorios establecidos, se estimulará más inversión privada permitiendo que las tecnologías maduren; lo que resulta en reducciones de costos.
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