Por Natalia Lobo
5/6/2018
A finales de 2015, a Harry Kane se le llamaba “milagro de una temporada”. El delantero del Tottenham estaba pasando por una sequía de goles y llevaba 9 partidos sin anotar. La campaña pasada había firmado 31 tantos en todas las competiciones… Entonces, ¿cuál era el problema?
Ninguno. A Kane no le pasaba más que una mala racha, de esas que han sufrido todos los delanteros. El inglés terminó la campaña con 25 goles, siendo el máximo goleador de la Premier y ayudando a su equipo a clasificar a la Champions League. Para la temporada 2016/17, Kane repitió como máximo goleador de la liga inglesa con 29 tantos, único en lograrlo.
Los récords de Kane no se detienen allí. El atacante terminó el 2017 como máximo goleador en el año calendario. Con 56 tantos, superó a Lionel Messi por dos goles. Asimismo, superó la marca de Alan Shearer de 36 goles en un año natural en la Premier League con 39 dianas. De igual forma, es considerado el jugador más valioso por el CIES, por una cifra de 235 millones de dólares.
Por ello, no es de extrañar que el jugador de 24 años sea una de las piezas claves en el esquema de Inglaterra para el Mundial de Rusia 2018. Tanto es así que el delantero será el capitán de la selección en la máxima cita luego de que Gareth Southgate le diera el brazalete.
Kane salvador
Harry Kane se viste con los colores de Inglaterra desde el 2010, cuando fue llamado para el equipo sub-17. Desde allí, ha ido subiendo de categoría y su debut con la selección absoluta se dio el 27 de marzo de 2015 en las Eliminatorias para la Euro 2016. Kane solo espero 79 segundos para marcarle a Lituania su primer gol con su país.
Sin embargo, en la Eurocopa de Francia, Kane no pudo marcar ningún gol. Se reivindicó en las Eliminatorias para Rusia 2018, en las que marcó cinco goles en cinco partidos, incluyendo el tanto de la clasificación ante Eslovenia. En total, ha marcado 12 dianas en 23 partidos como internacional.
Por ello, Southgate cree en Kane para que sea no solo la referencia de ataque sino el alma de un equipo lleno de jugadores jóvenes y con ganas de demostrar que su selección puede colarse entre las grandes.