Por Cambio16
21/12/2016
Las fuerzas iraquíes hallaron este lunes los cadáveres de 15 personas en un pozo de agua al sur de Mosul, que se cree que fueron ejecutados por Daesh, según informaron funcionarios del gobierno.
El gobernador del municipio de Al Shura, Jaled Yar al Yaburi, dijo que los cuerpos fueron hallados en la aldea de Saf Al Tut, que pertenece a Al Shura, a 40 kilómetros al sur de Mosul, y agregó que han comenzado a recuperar los cadáveres con el fin de identificarlos y esclarecer las circunstancias de su muerte.
Asimismo, indicó que la información preliminar apunta al grupo terrorista como el responsable de lo ocurrido. La Comandancia de Operaciones para la Liberación de Nínive aseguró que el Ejército iraquí, con la ayuda de varios vecinos, halló también restos de ciudadanos asesinados por los yihadistas.
Las víctimas fueron asesinadas «brutalmente» y los restos de sus cadáveres fueron abandonados al aire libre en el municipio de Hamam Al Alil, a 25 kilómetros al sur de Mosul, explicó la Comandancia en un comunicado.
Las fuerzas iraquíes junto con las tropas kurdas «peshmergas» encontraron recientemente un gran número de fosas comunes en las zonas recuperadas por los radicales, especialmente al sur de Mosul, y en otras áreas próximas a la comarca de Sinyar.
Por otra parte, el presidente del Comité de Seguridad de la provincia de Nínive, de la que Mosul es capital, Mohamed al Bayati, aseguró que tanto las fuerzas iraquíes como la coalición internacional bombardearon anoche varias sedes del grupo yihadista, situadas en el área occidental de Mosul.
Uno de estos ataques fue en la zona de Al Akidat, que causó la muerte de 7 terroristas, entre ellos un líder responsable de la seguridad de la misma zona, llamado Ahmad Jalfan al Yaryari. Además, aclaró que los bombardeos continúan en el sector occidental de la ciudad forma intensa contra objetivos, tanto fijos como móviles.
La policía federal y otras fuerzas iraquíes se preparan para lanzar una ofensiva en los próximos días para recuperar esta zona de Mosul que se encuentra en manos del grupo yihadista y cuya liberación se espera próximamente, según la fuente.
El pasado 17 de octubre, las tropas iraquíes y kurdas lanzaron una gran ofensiva para intentar arrebatar al Estado Islámico la provincia de Nínive y su capital, Mosul, que fue conquistada por los terroristas en 2014.
En este periodo de dos meses, las autoridades han anunciado la muerte de centenares de extremistas en esta ciudad y sus alrededores, mientras que más de 100.000 civiles se han visto obligados a desplazarse por los combates.