Ha sido un parto, pero no se ha necesitado cesárea. Con 188 votos, por encima de la mayoría absoluta, el gobierno de Pedro Sánchez ha logrado aprobar, con el apoyo de 11 partidos, los Presupuestos Generales del Estado.
Esta ley, la más importante del año para cualquier Parlamento, va a permitir desbloquear unas cuentas del Estado imprescindibles y afrontar la grave crisis económica en la que nos encontramos por culpa de la pandemia.
No ha sido nada fácil y la negociación a varias bandas, inclusive con partidos independentistas y separatistas, ha tensado una cuerda que ha dejado mal sabor de boca en la bancada conservadora.
Sin embargo, una vez más, Pedro Sánchez logra su objetivo a pesar de las interferencias de Pablo Iglesias. Sánchez tenía que sacar los presupuestos sí o sí. Porque también se jugaba la estabilidad política y la supervivencia de su Gobierno de coalición.
Hay que reconocer que la habilidad y la estrategia que despliega el presidente del Gobierno son factores que, por ahora, le permiten sortear todos los envites que se le han presentado. Veremos sin en el futuro los apoyos de los nacionalistas radicales le pasan factura.
Por el momento, Pedro Sánchez tiene vía libre siempre y cuando Pablo Iglesias no ponga más palos en la rueda. Pero ambos saben que no hay alternativa a este Gobierno de coalición por lo menos hasta las próximas elecciones generales previstas para el año 2023.
El interrogante que queda por dilucidar es saber si las cuentas, las más sociales de toda nuestra historia democrática, son reales y si van a permitir afrontar con solvencia la grave crisis que nos hostiga.
Lo veremos en un futuro próximo. Pero ahora toca remangarse, gastar bien, aportar soluciones a los graves problemas que afectan a nuestro tejido industrial y, también, preparar el futuro de los grandes cambios económicos que se avecinan.
Las ayudas europeas, cómo no, son bienvenidas y nos servirán de paraguas para dar salida a esta crisis.
Si todos esperamos con ansiedad la vacuna que nos proteja del virus, los PGE también deben convertirse en la primera vacuna para nuestra economía.
Entradas anteriores:
- Navidad y Vacunas
- A vueltas con ETA y EH Bildu
- Trump no sabe perder
- Confinamiento a la carta
- Casado rompe con Vox
- “Hooliganismo” político
- ¡Vamos a peor!
- Una extraña nueva normalidad
- Fumata blanca en Bruselas
- Gana Feijoo se consolida Urkullu
- Reconstrucción y recuperación
- Abuelos abandonados
- !Basta ya, así no!
- «Por fin, buenas noticias»
- «Tormenta perfecta»
- «Confinados o confiados»
- «En el fango político»
- «Nueva normalidad»
- La Unión Europea se la juega
- Política de mascarilla
- De la soberbia a la humildad
- Nada va a ser igual
- Contra el coronavirus responsabilidad ciudadana
- No caigamos en la histeria
- Tragedia en Zaldibar
- Eutanasia, esta vez sí
- Reencuentro Sánchez y Torra
- Desliz con Juan Guaidó
- Legislatura embarrada
- Desarmen el lenguaje
- Valiente y arriesgado
- Las doce campanadas sin gobierno en España
- Good Bye Europa
- Calentamiento global. Hay que enfriar el planeta
- Habrá gobierno para Nochebuena
- Campo de minas el acuerdo electoral PSOE-Podemos
- Un pan como unas tortas
- Debate electoral sin fu ni fa
- “Estaba muerto pero mal enterrado”
- Tsunami o volcán
- Cataluña y Quim Torra entran en campaña
- Insomnio político
- “Poneos de acuerdo, por favor”
- Ni imponer ni impedir
- Coalición o colisión
- Todos somos Open Arms
- Un fracaso incomprensible
- Iglesias debe ceder
- Ciudadanos, sin rumbo
- España en funciones
- Órdagos sí, pactos no
- Gana Casado, pierde Rivera
- Que no nos engañen
- Pactos y vetos
- A gobernar
- Voten por Europa
- Partido de Vuelta
- El milagro Sánchez
- Debates obligatorios
- Desarmar la palabra
- ETA entra en campaña
- Fichajes y adhesiones
- Política quebrada
- Maduro o Guaidó
- El órdago de Vox
- La mochila de Vox
- La prueba del algodón
- Arde París, Macron se quema
- Seísmo electoral en Andalucía
- “Golpista”, “fascista” y escupitajo
- Un supremo escándalo
- A vueltas con los restos de Franco
- Más que unos presupuestos
- Ultimátum interruptus
- Cloacas y podredumbre
- Los cien días
- Una Diada triste
- Una rentrée endiablada
- Por fin
- Dejen a las víctimas en paz
- Que nadie utilice la inmigración
- Casado, pata negra
- “Les bleus” multicolor
- Hartazgo informativo y político
- No damos la talla
Lea también en Cambio16.com: