Por Cambio16
01/10/2017
La Policía y la Guardia Civil se han visto obligadas a actuar para impedir el referéndum de este domingo. Los agentes se han desplegado por todo el territorio catalán antes de la apertura de los colegios.
Agentes de la @guardiacivil requisan las urnas instaladas en el pabellón deportivo de Sant Carles de la Rápita, Tarragona#EstamosporTI pic.twitter.com/AHMpbUSQAz
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Los efectivos han realizado intervenciones, algunas con fuerza y con cargas en los colegios. El objetivo es incautar los efectos dedicados a dicha votación.
Ante lo sucedido, el ministro del Interior, Juan Ignacio Zoido, ha pedido al Govern encabezado por Carles Puigdemont que «paren esta auténtica locura» y el camino del «precipicio» al que están llevando al pueblo catalán.
Las primeras imágenes de tensión entre Policía y votantes se han vivido en Girona. Ha sido en el colegio Sant Julià de Ramis donde estaba previsto que votara a las 9.30 el presidente de la Generalitat, Carles Puigdemont.
1- La actuación de @policia y @guardiacivil está dirigida a la incautación con proporcionalidad del material electoral#EstamosporTI
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También en Barcelona agentes antidisturbios de la Policía han protagonizado momentos de tensión y confusión en distintos centros de votación. Siempre según la información de las autoridades, se han producido varios heridos.
El papel de los Mossos
En total, en torno a 12.000 efectivos de la Policía Nacional y la Guardia Civil se encuentran movilizados en Cataluña. Y su actuación se debe a que los Mossos d’Esquadra que acuden a los centros de votación del 1-O con la orden judicial de cerrarlos se limitan a levantar acta sobre las concentraciones de personas desde primera hora y se marchan entre aplausos de los allí congregados.
No obstante, la Policía catalana ha procedido a clausurar urnas en una quincena de centros, que también han sido cerrados.