Por Efe
20/04/2016
Google ha asegurado que se toma «seriamente» las preocupaciones expresadas por la Comisión Europea (CE), que le ha acusado formalmente de abuso de posición dominante con su sistema operativo Android, y afirmó que trabajará con esa institución para demostrar que es «bueno para la competencia». «Nos tomamos estas preocupaciones en serio», afirmó la compañía estadounidense en su blog corporativo europeo.
«Pero también creemos que nuestro modelo de negocio mantiene bajos los costes para los fabricantes y alta su flexibilidad, a la vez que ofrece a los consumidores un control sin precedentes de sus dispositivos móviles», continuó. Google garantizó que «trabajará» con la Comisión Europea para «demostrar la cuidadosa manera en que hemos diseñado el modelo de Android, de manera que sea bueno para la competencia y para los consumidores».
La empresa lanzó Android en 2007 como un sistema operativo «gratuito y de fuente abierta, respaldado por numerosos socios de hardware». «Android ha emergido como un motor para el software móvil y la innovación en hardware«, subrayó, y agregó que ha «dado poder a cientos de fabricantes para crear grandes teléfonos, tabletas y otros dispositivos». Además, recalcó que ha permitido a desarrolladores de diferentes magnitudes «llegar a audiencias enormes», con el resultado de que «los usuarios disfrutan extraordinarias opciones de aplicaciones y dispositivos a precios más bajos que nunca».
Google explicó que los acuerdos que mantiene con sus socios son «completamente voluntarios» y que «cualquiera puede utilizar Android sin Google«. «Se puede descargar todo el sistema operativo gratis, modificarlo como se quiera y construir un teléfono», algo que hacen compañías como Amazon, indicó.
También dejó claro que los fabricantes que quieren participar en el ecosistema de Android «se comprometen a probar y certificar que sus dispositivos pueden usar las aplicaciones de Android», sistema que permite el funcionamiento de las aplicaciones entre diferentes dispositivos que emplean el mismo sistema operativo. Asimismo, aseguró que cualquier fabricante puede descargar las aplicaciones de Google en su dispositivo y agregar otras gratis.
La compañía apuntó que, aunque la descarga de Android es gratuita para los fabricantes, «es costoso» desarrollarla, mejorarla, mantenerla segura y defender sus patentes, de manera que compensa esos costes con «los beneficios que generamos con nuestras aplicaciones de Google y los servicios que distribuimos a través de Android».
Por último, recordó que a los usuarios les resulta «fácil y simple» personalizar sus dispositivos y añadirles aplicaciones «que compiten directamente con las nuestras». Google señaló que se han descargado más de 50.000 millones de aplicaciones en su sistema operativo, algunas tan populares como Spotify, WhatsApp, Angry Birds, Instagram o Snapchat, lo que demuestra a su juicio «lo fácil que es para los consumidores utilizar las aplicaciones que les gustan».
La CE ha acusado oficialmente a Google de abusar de su posición dominante al obligar a los fabricantes y operadores de los móviles y tabletas que operan con Android a instalar de forma predeterminada sus servicios, como su buscador y su navegador Chrome, y no otros de sus competidores.