Por Cambio16
30/03/2017
Tras su decisión de dejar sin inmunidad a los parlamentarios venezolanos y habilitar a Nicolás Maduro a aplicar la Justicia militar, el Tribunal Supremo de Justicia de Venezuela (TSJ) decidió en horas cercanas a la medianoche del miércoles (hora de Venezuela) que será el tribunal el que asumirá por completo la responsabilidad de las competencias parlamentarias argumentando el «desacato» en que estaría el cuerpo legislativo; una decisión que completa lo que a todas luces es la deshabilitación del Parlamento y que manifiesta los criterios cada vez más restrictivos con relación al ejercicio de la función pública de órganos o entes que no controla el gobierno chavista y los golpes al Estado de Derecho en el país caribeño.
En un fallo de la Sala Constitucional del tribunal, donde resuelve que no existe impedimento alguno para que el Ejecutivo venezolano constituya empresas mixtas para la explotación petrolera -acción que requería la aprobación del Parlamento-, se detalla en el punto 4.4 correspondiente a la decisión que «se advierte que mientras persista la situación de desacato y de invalidez de las actuaciones de la Asamblea Nacional (Parlamento), esta Sala Constitucional garantizará que las competencias parlamentarias sean ejercidas directamente por esta Sala o por el órgano que ella disponga, para velar por el Estado de Derecho».
A inicios de 2016, esa corte declaró en desacato al Parlamento por considerar que no desvinculó formalmente a tres diputados acusados de fraude electoral. Con esa declaratoria, el TSJ -señalado por la oposición de servir al gobierno del presidente Nicolás Maduro– ha anulado todas las decisiones de la Asamblea, que asegura ya cumplió con la separación de los legisladores.
La escalada de inhabilitaciones al Parlamento inició esta semana al anular un acuerdo aprobado el 21 de marzo por el bloque opositor, que pidió a la Organización de Estados Americanos (OEA) convocar a su Consejo Permanente para evaluar la aplicación de la Carta Democrática en Venezuela.
Para Cecilia Sosa, ex presidente de la extinta Corte Suprema de Justicia, el TSJ «se ha puesto por encima de la Constitución», pues el fuero parlamentario sólo puede ser removido por el propio Legislativo, tras solicitud de la corte.
«Con sus decisiones, el TSJ ha logrado su objetivo de paralizar la Asamblea, generando una ruptura del orden constitucional», declaró a la AFP.
Maduro descarta de plano un adelanto de las elecciones presidenciales, previstas para diciembre de 2018, mientras las regionales siguen en el limbo, pues debieron realizarse a fines del año pasado, pero el Poder Electoral las pospuso para 2017 sin que aún tenga fecha establecida.