Por Cambio16
05/05/2017
Los nuevos gestores del Banco Popular estudiarán la venta de su filial de tarjetas Wizink y de su franquicia estadounidense TotalBank para impulsar los ratios de capital tras unas nuevas pérdidas de 137 millones de euros en los primeros tres meses del año.
En las primeras cuentas bajo la presidencia de Emilio Saracho, Popular volvió a sufrir el lastre de su negocio inmobiliario, mientras la nueva cúpula del grupo trata de acometer una limpieza del balance.
La entidad ha provisionado 496 millones de euros para contener el riesgo de sus activos inmobiliarios «tóxicos», que ascienden a 37.000 millones de euros.
Para captar fondos con los que cubrir las provisiones, el consejero delegado Ignacio Sánchez-Asiaín, que se unió al grupo en abril, dijo que el Popular venderá activos al margen de su negocio principal en España.
Preguntado sobre si vendería Wizink o TotalBank, Sánchez-Asiaín dijo que consideraría ofertas y que esperaba cerrar la venta de TotalBank este año.
«(Wizink) Es un activo muy atractivo por su rentabilidad y crecimientos, y al precio adecuado lo podríamos vender, si no seguiremos recogiendo sus beneficios», declaró.
La participación del 49 por ciento en Wizink, un proyecto lanzado en 2014 con el fondo estadounidense Varde Partners, está valorada en unos 1.000 millones de euros, según analistas de UBS. TotalBank, con sede en Florida, está valorado en unos 400 millones, dijeron.
Los títulos del banco, que iniciaron la sesión con pérdidas, remontaban tras los comentarios y subían casi un 5 por ciento a 0,722 euros a las 1544 hora local.
Como resultado de una revisión de sus cuentas pasadas, el grupo elevó la estimación de las pérdidas récord registradas en 2016 a 3.611 millones de euros, frente a los 3.485 millones anunciados inicialmente, aunque dijo que el impacto final se anunciará en el segundo trimestre.
El banco, el más afectado entre los cotizados por la crisis del ladrillo en España, relevó el pasado diciembre al presidente Ángel Ron ante el derrumbe de su valor en bolsa por las dudas acerca de su balance y adelantó en abril que tenía que realizar ajustes en su estados financieros por provisiones insuficientes en varias operaciones.