En la antesala de la COP27, en Egipto, los países más pobres y más afectados por la crisis climática presionaron para hacerse sentir. El llamado Grupo V20, representado por las naciones más vulnerables a los perversos efectos del clima y el G-7 anunciaron un acuerdo de cooperación sobre protección financiera que responde a las pérdidas y daños.
Líderes de ambas agrupaciones convinieron en lanzar conjuntamente el «Escudo Global contra los Riesgos Climáticos» en la cumbre de Naciones Unidas en un esfuerzo por acelerar el financiamiento a gran velocidad y escala.
El V20 es un bloque de países africanos, asiáticos y latinoamericanos que se consideran altamente expuestos al calentamiento. En 2015 decidieron reunirse para protegerse mutuamente y buscar fondos que mitiguen los impactos de la crisis climática. Mientras que el G7 está conformado por las economías fuertes de Alemania, Canadá, Estados Unidos, Francia, Italia, Japón y el Reino Unido. La Unión Europea cuenta con representación política.
El presidente del V20, Ken Ofori-Atta, ministro de Finanzas de la República de Ghana, y Svenia Schulze, ministra de Cooperación Económica y Desarrollo de Alemania, país que preside el G7, perfilaron en Washington DC los detalles finales del Escudo Global.
Los estragos de los fenómenos meteorológicos extremos, en pérdidas de vida y en pérdidas económicas, saltan a la vista. Tanto el G7, el V20, como los organismos financieros internacionales, como el FMI y el BM coinciden en que la situación es apremiante. Cifras recientes advierten que el cambio climático ha eliminado la quinta parte de la riqueza de los países del V20. Más de 500.000 millones de dólares desde 2000.
Para la mayoría de los países V20, estas pérdidas superan su crecimiento. Se están empobreciendo debido a estos impactos.
El G7 impulsa Escudo Global para países vulnerables
En reuniones previas de estos multilaterales, también celebradas en Washington, el expresidente de las Islas Maldivas, Mohamad Nasheed fue contundente. Intervino en nombre de veinte países vulnerables al cambio climático y dijo que están considerando suspender el pago de deuda.
Precisó que el endeudamiento grupal asciende a unos 685.000 millones de dólares. Una cantidad tan grande que, según el líder político, “deberían simplemente abandonarse, dada la injusticia del problema, debemos negarnos colectivamente a pagar”.
Días después, otro encuentro de alto impacto, arrojó un acuerdo de cooperación sobre protección financiera. Estaban presentes V20 y Alemania (G7) en la misma mesa.
Ofori-Atta manifestó su complacencia que la presidencia del G7 de Alemania se haya asociado con el V20 para lanzar el Escudo Global contra los Riesgos Climáticos. “Es obvio que nuestras pérdidas socioeconómicas se están agravando debido a la mayor escala de riesgos provocados por el clima. Solo los pagos del servicio de la deuda de V20 ascienden a medio billón de dólares para los próximos cuatro años”.
Además, comentó, el Grupo se enfrenta a la inflación y la depreciación de la moneda frente al dólar. Factores que añaden complejidades al asunto.
La financiación preestablecida y la entrega eficiente de subsidios para seguros a través del Fondo Fiduciario V20 son fundamentales para garantizar que no aumentemos la carga de nuestra deuda, afirmó. “Es importante reconocer que no pedimos caridad. Lo que necesitamos es una cooperación económica más fuerte entre el mundo desarrollado y los países vulnerables al clima del mundo. Necesitamos nuevas inversiones habilitadas por instrumentos de protección bajo el Escudo Global. Para fortalecer nuestras economías, cadenas de suministro y comunidades contra estos riesgos climáticos intensos y frecuentes”.
Mayor consciencia de los países ricos
Svenja Schulze reconoció que el cambio climático es una realidad dramática. “Ya no se trata de si se producirán pérdidas y daños relacionados con el cambio climático. Se trata solo de la frecuencia con la que se producirán, y de la magnitud y el costo de los mismos. Y lo que es más importante, de quiénes se verán más afectados”, añadió.
Para evitar que la crisis climática empeore, confió la ministra, “debemos impulsar la acción climática global con un compromiso aún mayor. Esto incluye que debemos reconocer que los países más vulnerables, en particular, necesitan nuestra solidaridad para enfrentarlo. Aquí es donde queremos construir puentes para la conferencia mundial sobre el clima (COP27) en Egipto, proponiendo soluciones concretas”.
El mundo necesita acciones concretas más que palabras. Subrayó la representante del gobierno de Alemania, en la presidencia del G7, que la decisión de construir juntos un Escudo Global contra los Riesgos Climáticos es un gran paso. Ofrecerá a millones de personas pobres y vulnerables protección financiera y social después de los desastres climáticos.
El tema de las “pérdidas y daños” es uno de los que más se discute en las negociaciones climáticas internacionales. Está ligado a la responsabilidad de los países industrializados por causar el cambio climático y con la cuestión asociada de la justicia climática.
Durante su presidencia del G7, Alemania comenzó a desarrollar un “Escudo Global contra los Riesgos Climáticos”. Un movimiento que ha sido apoyado unánimemente por el Grupo, confió la ministra
El Escudo reúne actividades en el campo de la financiación y la preparación para el riesgo climático bajo un mismo techo, dijo. Este proceso está vinculado a los planes de contingencia de los países en desarrollo. Como resultado, las personas y las autoridades podrán acceder a la asistencia que necesitan con urgencia.
En qué consiste el Escudo Global
El Escudo Global promovido e impulsado por el G7, implica:
* Fortalecimiento de la arquitectura global de financiamiento y seguros de riesgos climáticos y de desastres (CDRFI) en el G7, V20 y otras economías vulnerables al clima. Para garantizar la coherencia de los esfuerzos de las diferentes instituciones y donantes a nivel mundial, regional y nacional.
* Una estructura de financiación global, flexible y colaborativa para movilizar y agrupar los respectivos donantes y otros fondos. Y permitir un enfoque global más sistemático para cerrar las brechas de protección.
* Protección sostenida frente a los crecientes riesgos climáticos mediante la ampliación de los programas exitosos de CDRFI existentes. Incluidos los planes de protección social, y la preparación de paquetes de apoyo específicos de cada país y basados en las necesidades. Entre ellos, la ampliación de la prima inteligente y el apoyo de capital para abordar las barreras de asequibilidad.
Este Escudo se basa en InsuResilience Global Partnership que el V20 y el G20 introdujeron anteriormente con el objetivo de proteger a 500 millones de personas en países vulnerables al clima para 2025. Este plan es sustancialmente más amplio.
La membresía del Grupo V20 es de 58 economías que representan a unos 1.500 millones de personas. Entre ellas están Afganistán, Bangladesh, Barbados, Burkina Faso, Camboya, Chad, Colombia. Así como Costa Rica, Costa de Marfil, República Democrática del Congo, República Dominicana. Etiopía, sede de la COP27, Fiji, Gambia, Ghana, Granada, Guatemala, Guinea, Guyana, Haití, Honduras, Kenia, Líbano, Liberia, Madagascar, Malawi, Maldivas, Islas Marshall, Mongolia, Marruecos.
Asimismo están Nepal, Nicaragua, Níger, Filipinas, Ruanda, Santa Lucía, Samoa, Senegal, Sudán del Sur, Sri Lanka, Sudán, Tanzania, Uganda, Vietnam y Yemen, entre otros.