Por Benito Guerrero
12/03/2017
Los hábitos de consumo de la sociedad han cambiado en los últimos años dando paso a la economía colaborativa, la reutilización y el reciclaje. Los responsables de esta revolución, que llegó con la crisis económica, son las nuevas tecnologías e internet. Por este motivo, aplicaciones como Wallapop o Vibbo son utilizadas por millones de usuarios que intercambian objetos y mercancías. A esto se le suma la transformación de los modelos sociales. Ahora los empleos fijos y las residencias estables han dejado paso al emprendimiento y a varios cambios de vivienda a lo largo de la vida.
En este contexto hay un claro protagonista: la logística. Comprar un artículo de segunda mano o hacer una mudanza puede suponer un gran quebradero de cabeza y llegar a influir incluso en las relaciones entre familiares o parejas. En muchas ocasiones para realizar estos traslados no se pueden utilizar las empresas convencionales, ya que no cubren toda la demanda y solicitan un precio desorbitado.
En este contexto nace Furgo, una aplicación móvil que pone en contacto a personas que ofrecen un servicio de transporte con aquellas que necesitan de sus servicios. Javier Sánchez Marco, CEO y cofundador de la compañía, lo tiene claro: “Nuestra intención es ayudar a la gente a mover sus cosas y también facilitar el trabajo de los transportistas. Además de su aplicación para iOS y Android, este servicio cuenta con una web que permite la comunicación entre transportistas y usuarios, que pueden ser pymes, autónomos o particulares.
El funcionamiento es muy sencilllo. En primer lugar, aquellas personas que deseen transpotar algo, suben una imagen con una descripción a su perfil. Posteriormente son los transportistas los que envían un mensaje ofreciendo un presupuesto personalizado con unas condiciones específicas a través de un chat. Cuando el usuario acepta una de las ofertas, se efectúa el pago acordado a través de la plataforma Stripe y recibe un código de verificación que deberá facilitar al transportista cuando se haya completado la operación para poder así cobrar el trabajo realizado.
A través de este sevicio se puede mover casi todo: una puerta antigua para restaurar, un piano, un tiovivo, coches, bicicletas, una oficina completa, esculturas o un parque infantil. La inmediatez que proporciona la aplicación facilita la optimización de los beneficios de los transportistas, que pueden modificar su ruta de reparto e incluir un sercicio con esta aplicación en el último momento, ya que funciona en un radio de 100 kilómetros.