Por Joaquín Robles
11/5/2017
Analista de XTB
El petróleo se recuperó después de que Arabia Saudita y Rusia alimentaran las expectativas de que los recortes de la producción podrían extenderse por nueve meses, en vez de los seis previstos hasta la fecha, de cara a la próxima reunión de Viena el 25 de mayo.
Los futuros cerraron en su máximo de más de dos semanas. A pesar que las restricciones de producción iniciadas el uno de enero están funcionando, los inventarios globales aún no están en el nivel prefijado por la OPEP y sus aliados. Los ministros ruso y saudí acordaron que el acuerdo debería extenderse hasta el primer trimestre de 2018 con el mismo volumen de reducciones.
Cuando Arabia Saudita y Rusia hablan juntos, envían una señal muy fuerte al mercado, ya que son dos de los tres principales productores mundiales. Además con la alianza de estos dos países, las posibilidades de obtener un acuerdo con el resto de miembros son mayores. La ampliación de los recortes a los volúmenes ya acordados es necesaria para alcanzar la meta de recortar los inventarios mundiales hasta el promedio de cinco años.
En las últimas semanas hemos visto ciertas dudas por parte de los inversores en cuanto a la efectividad de los recortes hasta el momento. Un aumento en la producción libia, junto con un aumento en la producción estadounidense y signos de recuperación en Nigeria, puede ser una amenaza ante la estrategia de la OPEP para reequilibrar el mercado y aumentar los precios.
West Texas Intermediate subió en junio 1,01 dólares, o 2,1%, hasta los 48,85 dólares el barril en la Bolsa Mercantil de Nueva York. Fue el cierre más alto desde el 28 de abril. El volumen total negociado alcanzó alrededor del 38 por ciento del promedio de 100 días. El Brent subió 98 centavos, o 1,9%, a 51,82 dólares el barril en la bolsa ICE Futures Europe, con sede en Londres. También fue el cierre más alto desde el 28 de abril. El crudo mundial de referencia finalizó la sesión con una prima de $ 2,66 al WTI en los futuros de vencimiento del mes de julio.
Los miembros de la OPEP acordaron en noviembre recortar la producción en 1,2 millones de barriles diarios. Varios países no miembros, entre ellos Rusia, llegaron a un acuerdo en diciembre para aportar 600.000 barriles diarios de reducciones.
Aun así no todo el mundo está a bordo. Kazajstán, el mayor productor de la antigua Unión Soviética después de Rusia, no está listo para unirse automáticamente a un acuerdo ampliado, dijo su ministro de Energía, Kanat Bozumbayev. La nación de Asia Central discutirá su nivel de participación en las reuniones de Viena los días 24 y 25 de mayo.
Mientras que la OPEP y sus aliados están recortando la producción, la extracción estadounidense ha subido al nivel más alto desde agosto de 2015 y está a punto de subir aún más cuando los exploradores ponen en marcha el incremento más largo de la perforación de crudo desde 2011.
Se prevé que la producción de crudo en las principales obras de donde se utiliza el fracking de los Estados Unidos aumente alrededor de 5,4 millones de barriles diarios en junio, el nivel más alto desde mayo de 2015, según el informe mensual de productividad de perforación de EIA.