Por Cambio16
4/1/2018

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El fabricante tecnológico Intel ha reconocido la existencia de una vulnerabilidad en sus procesadores. Este fallo de Intel permite acceder a datos sensibles de los dispositivos donde estos están instalados. La compañía ha asegurado que el ‘bug’ no es exclusivo de chips de su marca. También está presente en componentes de otros fabricantes.

Fallo de Intel

Intel ha emitido un comunicado como respuesta oficial. Las informaciones alertaban sobre la existencia de una gran vulnerabilidad en procesadores de la marca. Sistemas operativos como Linux o Windows trabajan ya en sendas actualizaciones de seguridad de sus ‘software’. El objetivo es minimizar el fallo de Intel. Éstas apuntan a ralentizar el rendimiento de los equipos entre un 5% y un 30%.

Todavía sin precisar oficialmente el origen del ‘bug’. Intel ha explicado que es posible «obtener indebidamente datos sensibles» de los equipos informáticos que cuentan con estos componentes. No obstante, la compañía ha añadido que «cree» que esta vulnerabilidad no genera riesgos de «corrupción, modificación o eliminación de datos».

Un problema de «muchos» fabricantes

El fabricante estadounidense ha asegurado que las noticias que aseguran que este fallo de Intel de seguridad únicamente afecta a productos de su marca son «incorrectas». La compañía afirma que los procesadores «de muchos vendedores distintos» son susceptibles a estar afectados por esta vulnerabilidad.

En este sentido, Intel ha explicado que está trabajando con otras tecnológicas. Ha citado como ejemplos a AMD y ARM Holdings, dos de sus principales competidoras. Se persigue el desarrollo de una solución al problema a nivel sectorial. Así, la empresa ha comenzado a ofrecer «actualizaciones de ‘software’ y ‘firmware'» para mitigar esta vulnerabilidad.

Intel también ha desmentido que estas actualizaciones vayan a perjudicar al rendimiento de los equipos. Su efecto dependerá de la carga de trabajo y «no debería ser significativo» para el usuario medio. Además, el fabricante ha asegurado que esta posible ralentización «será mitigada con el tiempo».