ExxonMobil se encuentra entre los principales emisores globales de gases de efecto invernadero que calientan el planeta y derivan en caos climático. Pero su director ejecutivo, Darren Woods, afirmó que tal como están las cosas, el mundo no está en camino de cumplir sus objetivos climáticos, y deslizó que es culpa de la gente y no de las grandes petroleras. Su declaración desató reacciones iracundas de los expertos en clima.
ExxonMobil es la mayor corporación de gas y petróleo de Estados Unidos. Obtuvo beneficios por 36.000 millones de dólares en 2023. Darren Woods manifestó que ha presentado propuestas a gobiernos de todo el mundo para iniciar este camino al cero neto o neutralidad de carbono utilizando la tecnología existente. «Pero se ha visto obstaculizada por la necesidad de transparencia en los costes y porque la gente corriente también genera las emisiones”, dijo.
En una entrevista con la revista Fortune señaló que las personas que generan emisiones deben ser conscientes y pagar el precio. «En última instancia, así es como se resuelve el problema», afirmó.
Woods insistió en que la sociedad no ha cumplido sus propias expectativas. «Francamente, la sociedad y el activista -la voz dominante en esta discusión- han tratado de excluir de la solución a la industria que tiene la mayor capacidad y potencial para ayudar», argumentó.
La multinacional adelanta una estrategia de contraataque frente a sus propios accionistas-activistas y las organizaciones ambientales. A principios de 2024, anticipándose a su asamblea anual, demandó a activistas inversores en un intento por evitar que su propuesta climática se sometiera a votación de los accionistas.
ExxonMobil y las emisiones de gases
Darren Woods dijo que el verdadero problema es que la transición a la energía limpia puede resultar demasiado costosa para los consumidores. «El sucio secreto del que nadie habla es cuánto va a costar y quién está dispuesto a pagarlo. Las personas que generan esas emisiones deben ser conscientes y pagar el precio por generarlas. Así se resuelve el problema”, detalló
El director ejecutivo de ExxonMobil dijo que el mundo “no está en el camino para reducir a cero neto para 2050 sus emisiones de gases de efecto invernaderos. Un imperativo para los científicos si se quieren evitar los impactos catastróficos del calentamiento global. “¿Cuánto está la gente dispuesta a pagar por la reducción de carbono? Tenemos oportunidades de producir combustibles con menos carbono, pero la gente no está dispuesta a pagarlo», advirtió.
Los expertos dicen que la retórica de Woods es parte de un intento más amplio de eludir la responsabilidad climática. No se puede construir ninguna nueva infraestructura importante de petróleo y gas si el mundo quiere evitar violar los límites de temperatura acordados. Pero Exxon, junto con otras grandes compañías petroleras está siguiendo adelante con agresivos planes de expansión de los combustibles fósiles. Gernot Wagner, economista climático de la Escuela de Negocios de Columbia, declaró a The Guardian que Wood es como el narcotraficante que culpa a todos menos a sí mismo por los problemas de drogas.
“Odio decirlo, pero Woods es el director ejecutivo de la mayor compañía petrolera que cotiza en bolsa, tienes influencia y tomas decisiones importantes. Exxon está a merced de los mercados, pero no se puede culpar al público por no solucionar el cambio climático”, añadió
Exxon sabe de su huella de carbono desde los setenta
El calentamiento del planeta lo causa, en gran medida, la quema de combustibles fósiles, y muchos de los impactos actuales de esa combustión (aumento de temperaturas, clima extremo) fueron predichos por los propios científicos de Exxon hace casi medio siglo.
Un estudio de Harvard de 2023 indica que las proyecciones de la empresa en las décadas de los setenta y ochenta fueron “al menos tan hábiles como las de los modelos académicos y gubernamentales independientes. Los propios científicos de Exxon predijeron la trayectoria del calentamiento global. Y luego pasaron décadas sembrando dudas sobre la ciencia y las políticas climáticas para proteger su modelo de negocios. Sin embargo, la multinacional trabajó con fuerza para sembrar dudas sobre la crisis climática y obstaculizar las acciones para frenar el uso de combustibles fósiles. Las revelaciones han motivado litigios contra Exxon en EE UU.
«Lo que realmente están tratando de hacer es blanquear su propia historia, hacerla invisible», señaló Robert Brulle, experto en políticas ambientales de la Universidad de Brown que ha investigado la desinformación climática difundida por la industria de los combustibles fósiles.
Un análisis de 2021 también demostró que ExxonMobil minimizó su propio papel en la emisión de gases y en la crisis climática durante décadas en sus mensajes públicos. “El manual es vender a los consumidores un producto que sabes que es peligroso, mientras niega o minimiza públicamente esos peligros. Luego, cuando los peligros no sean negables, culpan al consumidor”, precisó Naomi Oreskes, historiadora de la ciencia de Harvard.
Woods manifestó que el mundo esperó demasiado para desarrollar tecnologías libres de carbono. Dijo que Exxon reconoce la necesidad de descarbonizar y que un impuesto al carbono ayudaría.
Estrategias de opinión pública
Woods no menciona que su empresa presionó para defenderse de las disposiciones de una legislación que habrían aplicado fuertes impuestos a las empresas contaminantes para pagar los esfuerzos climáticos. Ni que un importante cabildero de Exxon fue filmado diciendo que el apoyo de la empresa a un programa de carbono era una estrategia de relaciones públicas destinada a frenar políticas climáticas más radicales.
«Durante décadas, nos dijeron que la ciencia era demasiado incierta para justificar la acción, que era prematuro actuar y que podíamos y debíamos esperar y ver cómo se desarrollaban las cosas. Ahora el CEO dice que hemos esperado demasiado. Si esto no es gaslighting, no sé qué lo es», asentó Oreskes.
Sobre la demanda de Exxon contra accionistas activistas que presionar a la empresa para que adopte estándares ambientales más estrictos, Woods dijo que pretenden detener el negocio central de Exxon, vender petróleo y gas, al que no accederá. «Queremos atender a los accionistas que son verdaderos inversores, que tienen interés en que esta empresa tenga éxito en la generación de retorno de sus inversiones. No nos sentimos responsables ante los activistas que secuestran la asamblea anual para promover una ideología», dijo
Entretanto, Brulle anunció los próximos pasos de la petrolera. «Gastan en combustibles fósiles y gastan miles de millones tratando de influir en la opinión pública y quieren que nosotros paguemos la factura del daño».