Por Cambio16
31/03/2017
A través de un comunicado, el ministerio de Asuntos Exteriores informó que el Gobierno de España sigue con atención y preocupación las acciones llevadas a cabo estos días por grupos incontrolados de viticultores franceses contra vinos de origen español perpetradas en almacenes de vinos y supermercados en Béziers y Narbona el sábado pasado, que han sido seguidos el día de ayer por ataques a diferentes supermercados en Nîmes.
«Estos hechos, que se producen con desafortunada periodicidad, al igual que los ataques que hemos venido sufriendo desde principios de año a camiones transportando vino a granel en las autopistas del sur de Francia, son motivo de preocupación para el Gobierno de España no sólo porque representan una quiebra del Estado de Derecho sino también y fundamentalmente porque suponen una violación flagrante del mercado único, pilar fundamental de la Unión Europea» reza el corto comunicado.
España ha trasladado oficialmente su preocupación a las autoridades francesas, como en su momento también se hizo a la Comisión Europea, por lo que estos hechos suponen de ataques a la libertad de comercio que pueden provocar de hecho una retracción en los clientes franceses que ven atacados sus establecimientos por vender en ellos productos de origen distinto que el francés.
Esta semana, viticultores del sur de Francia han destruido en tres supermercados decenas de botellas de vino procedentes de España y otros países de la UE y prometieron que continuarían con esas acciones. A juicio de los franceses, la acción es una protesta contra un «etiquetado engañoso» que induce a error a los consumidores sobre su origen.
Las importaciones en Francia de vinos procedentes de España han crecido un 40% en dos años, según estadísticas del pasado enero de FranceAgriMer. Entre 2015-2016, Francia importó 5,56 millones de hectolitros de vino español frente a 5,17 millones de hectolitros entre 2014-2015 y 3,98 millones entre 2013-2014.