Un momento cumbre atraviesan las renovables en el país, impulsadas por los fondos europeos de recuperación y la liquidez de los mercados. A un costado y tratando de llamar la atención a los agentes decisorios de España, están las minieólicas. Sus altos costes, entre otras razones, les dificulta competir con la tecnología solar fotovoltaica, pese a sus elevadas potencialidades en el hogar y sitios remotos.
A este sector se le suma la falta de apoyo y de políticas institucionales que fomenten su desarrollo, sostiene el Centro de Investigaciones Energéticas, Medioambientales y Tecnológicas. Por estas razones, las empresas productoras de minieólicas están estancadas y con una fuerte crisis.
Incluso, se le hace cuesta arriba cumplir con el Plan de Energías Renovables (PER) que implica integrar 300 megavatios (MW) en el sistema eléctrico español. Sus representantes ven casi imposible que con las actuales circunstancias cambien las limitaciones en el mercado minieólico, salvo algunos casos.
El Cemiat se animó a realizar un análisis del sector, en el marco del proyecto Small Wind Optimization and Market Promotion (Swtomp). Encontró que el mercado de aerogeneradores de pequeña potencia en España, “está muy difícil. Presenta condiciones poco menos que imposibles, para crecer y cumplir las metas”.
En ese sentido, no puede competir en costes con la tecnología solar fotovoltaica. Y los pocos fabricantes de aerogeneradores de pequeña potencia que sobreviven, suelen hacerlo diversificando su negocio con la fotovoltaica. Por tanto, no hay que perder de vista lo que decía el PER respecto a la minieólica: “esta tecnología necesita todavía ayudas para su desarrollo”.
Sin embargo, a sabiendas de esos requerimientos, nunca se llevó cabo en España debido a la eliminación de ayudas a la generación renovable. Las misma ayudas que sí tuvo la generación fotovoltaica durante la primera década de este siglo, indica el informe.
Presente y futuro de las minieólicas en España
La Asociación de Empresas de Energías Renovables (APPA) Minieólica y Ciemat firmaron un acuerdo de colaboración para impulsar la tecnología minieólica española. Tanto en foros como en mercados internacionales en los que ambas instituciones participen.
En principio lo harán en la Agencia Internacional de la Energía (International Energy Agency, IEA) y en la Asociación Mundial de Energía Eólica (World Wind Energy Association, WWEA).
Asimismo, y ante esta situación de estancamiento que vive la minieólica en España, los agentes del sector reunidos en APPA Minieólica han puesto en marcha una campaña que promoverá la tecnología bajo la marca SmallWindSpain.
El propósito es mostrar en el ámbito internacional que España es uno de los países con mejores tecnólogos en esta disciplina. Y dará visibilidad al tejido industrial que lidera esta iniciativa.
Empresas como Baiwind, Bornay, Ennera o Kliux Energies disponen de aerogeneradores de pequeña potencia de primerísimo nivel que pueden competir perfectamente en el mercado mundial.
Autoconsumo y en combinación con la fotovoltaica
Las minieólicas aprovechan los recursos del viento, mediante la utilización de aerogeneradores de potencia inferior a los 100 kW. De acuerdo con las normas internacionales, los molinos de esta tecnología deben tener un área de barrido que no supere los 200 m2.
Entretanto, estos pequeños aparatos permiten suministrar electricidad a zonas aisladas, la microgeneración distribuida y el autoconsumo en hogares. Evitan pérdidas de transporte y distribución. Su adaptación al recurso disponible permite emplear la energía del punto de consumo y puede fácilmente combinarse con fotovoltaica en instalaciones híbridas.
La expansión de esta fuente de energía en el planeta es cada vez mayor. Según los últimos datos registrados por la WWEA a finales de 2015 había 990.000 turbinas minieólicas instaladas en el mundo. Esto es, 45.000 más que el año anterior, lo que deja claro que cada vez más personas confían en ella.
En ese contexto, la potencia adquirida llegó ese año a los 900 MW, con China acaparando un 43% de esa capacidad. Seguida de Estados Unidos, con un 25%, Reino Unido, con 15% e Italia con 6%. En España, la potencia de la miniéolica fue de 60 MW, indicó el Instituto para la Diversificación y Ahorro de la Energía (IDAE).
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