Por Cambio16
12/11/2016
Un grupo de investigadores liderados por el científico español Salvador Aznar, en el Instituto de Investigación Biomédica de Barcelona, identificaron una proteína crucial para que las células tumorales puedan iniciar la metástasis.
“Metástasis es una palabra que provoca miedo porque en el 90 % de los casos de muerte por cáncer se ha producido este proceso”, explica el investigador.
Con este avance, la capacidad de los oncólogos para diagnosticar de mejor manera y con mayor prontitud el proceso de metástasis podría llevar a curar esta enfermedad en definitiva.
El grupo de Salvador Aznar es especialista en un tipo de células madre que están presentes en los tumores y cuyo papel es potenciar su crecimiento, informó el diario El País después del anuncio.
El descubrimiento, publicado en la Revista Nature, se logró gracias al estudio del comportamiento de estas células en muestras de carcinoma oral humano. De acuerdo con los científicos, lo primero que determinaron fue una subpoblación que apenas se dividía y que presentaba características muy similares a las de las células de la metástasis.
Además, estas células mostraban un metabolismo muy elevado de las grasas, uno de los principales factores que llamaron su atención.
Aznar clasificó la proteína descubierta bajo el nombre de CD36 y la definió como una molécula que transporta grasas y que está en la superficie de estas células. “Es la puerta de entrada de los ácidos grasos que provienen del medio exterior, de la dieta o de algún otro tejido”, explicó.
Tras realizar los exámenes estadísticos, los investigadores encontraron otros tipos de tumores como el melanoma, el cáncer de mama luminal y mostraron la presencia de esta proteína en carcinoma de ovario, de vejiga y de pulmón.
Sin embargo, lo más importante dentro de todos estos descubrimientos fue que cuando añadieron CD36 a células tumorales que no producen metástasis, éstas empezaron a hacerlo.
“Este hallazgo sin duda nos ayudará a dar diagnósticos mucho más acertados a los pacientes que padecen esta enfermedad. De hecho, hemos añadido un marcador (en referencia a CD36) que nos permite purificar las poblaciones metastáticas a un nivel sin precedentes”, afirmó Aznar.
“No creemos ni mucho menos que sea el único, pero este parece ser universal. A mayor nivel de CD36, mayor la probabilidad de que un tumor metastatice”, concluyó.
El laboratorio ya solicitó la protección por patente de los resultados y comenzaron una colaboración con la empresa inglesa MRC Technology, especializada en desarrollo de anticuerpos para uso clínico. Estos se probarán en ensayos clínicos en humanos y, si el resultado es positivo, podrían estar disponibles en un plazo de 5 a 10 años.