Por Cambio16
28/03/2016
En España se producen más de 4.000 ciberataques al día. Ocupa el tercer puesto en el ranking de los países más atacados por ciberdelincuentes. En todo el mundo causan unas pérdidas de 500.000 millones de dólares. Sólo en el año 2015 se produjo un aumento del 50% en incidentes relacionados con la seguridad informática. Las empresas, pero también los particulares, están cada vez más expuestos a estos ataques. Una de las causas principales: la tendencia a guardar la información en la nube -almacenes de archivos en internet-.
Estas son algunas de las conclusiones del encuentro de expertos celebrado en la Universidad Pontificia de Comillas ICAI-ICADE bajo el título de «Ciberseguridad: tecnología del futuro para una amenaza del presente».
Según los expertos, nuestros datos y los de las empresas se encuentran cada vez más expuestos a los ciberdelincuentes gracias a que son cada vez más los que optan por guardar los datos en plataformas alojadas en internet.
«La motivación de los ataques es, sobre todo, económica: el cibercrimen mueve más dinero que la droga», asegura Javier Jarauta, profesor de seguridad en la Escuela Técnica Superior de Ingeniería y director de consultoría del grupo SIA. Por ese motivo, el objetivo principal de estos ataques es la obtención de información crítica de personas, aunque también hay motivaciones políticas. Casos como los de eBay y Sony ponen de manifiesto que estamos expuestos a grandes ataques que pretender recopilar información para monetizarla.
Romper la seguridad de un iPhone (el dispositivo más seguro, según los expertos) está «valorado en un millón de dólares», según revela Javier Santos, profesor de seguridad en Comillas ICAI. Esto pone de manifiesto la existencia de un mercado negro que paga grandes cantidades de dinero a hackers para que descubran las vulnerabilidades no conocidas de los sistemas.
Los expertos han detectado «vectores de amenazas» -como los define Santos- debido a la alta exposición de los datos que pueden ser robados y utilizados por terceras partes con intenciones maliciosas. Entre las prácticas más comunes se encuentran el ciberespionaje, el ciberdelito, el ciberactivismo (como Anonymous) y el terrorismo.
«Hoy la guerra no se concibe de manera tradicional, sino que todas las guerras son también ciberguerras: la combinación de ambas produce la tormenta», aseguró Jarauta. «Muchos países, incluído España, tienen operativo un conjunto de ciberdefensa que es otro ejército aparte y cuya misión es la de atacar y defenderse», añade.
La Ley de Infraestructuras Críticas obliga a operadores, como son empresas eléctricas, gas y aeropuertos, entre otros, a protegerse frente a estos ataques. Los jóvenes no son realmente conscientes de que su seguridad privada puede estar amenazada por la presencia en redes sociales.
Al 10% de los norteamericanos les han robado dinero de su tarjeta de crédito y la cifra total sustraida asciende a 5.500 millones al año. Por todos estos motivos en necesario pararse a reflexionar sobre la necesidad de que los usuarios de internet aumenten las precauciones a la hora de dar sus datos o abrir correos electrónicos sospechosos.
«Fijarse en que el candado que identifica en internet a una página segura está cerrado» es una de las acciones que debemos realizar asiduamente, indica David Contreras, investigador del Instituto de Investigación Tecnológica de Comillas ICAI. Así sabremos que los datos están protegidos.