Reciclar plásticos y otros materiales sintéticos a menudo es costoso y no siempre es posible. Estos componentes no son biodegradables y terminan contaminando ríos, mares y bosques, donde permanecen durante décadas. Pero ahora, investigadores han encontrado una enzima que se «come» el plástico en solo unas horas y permite que se produzcan nuevas botellas de manera rentable.
Científicos de la Universidad de Portsmouth en el Reino Unido examinaron alrededor de 100.000 microorganismos diferentes y finalmente encontraron lo que estaban buscando. Una enzima bacteriana descompone el tereftalato de polietileno (PET) en sus partes constituyentes en un corto espacio de tiempo: en solo 10 horas.
Posteriormente, se lleva a cabo un proceso de reciclaje extremadamente eficiente, para la fabricación de botellas nuevas.
Logro medioambiental
El PET es el polímero termoplástico más común y se utiliza para fabricar botellas, fibras de poliéster, envases de alimentos y diversos componentes termoformados.
Según los investigadores, este proceso de reciclaje inicia una transición real hacia una economía circular y puede prevenir mejor que la contaminación plástica dañe nuestros océanos y el planeta. Esta tecnología también allana el camino para reciclar fibras de PET, otro desafío importante para garantizar un entorno limpio y protegido para las generaciones futuras.
Proyecto rentable
El estudio de la enzima «come plástico» fue realizado con la cooperación de la empresa Carbios. La firma francesa declaró que su objetivo es lograr el reciclaje a escala industrial en cinco años. También ha colaborado con compañías importantes como L’Oreal y Pepsi para un desarrollo más rápido. Los expertos independientes llaman a la nueva enzima un gran avance.
El director científico de Carbios, el profesor Alain Marty, declaró que los resultados obtenidos confirman el potencial industrial y comercial del proceso, que se probará en 2021 en la planta de demostración de la empresa en el Valle Químico Francés, cerca de Lyon.
También se introdujeron mutaciones para mejorar la capacidad de descomponer el plástico PET. Se desglosó una tonelada de botellas de plástico de desecho haciendo uso de la enzima optimizada. El 90% de ellos se degradaron en 10 horas. El hallazgo fue publicado en la revista «Nature».
Las botellas de plástico PET ahora se pueden descomponer en sus compuestos químicos cuando la enzima se «come» este material. Más tarde, el mismo se puede reutilizar para hacer botellas nuevas. El plástico producido por las tecnologías de reciclaje existentes solo son lo suficientemente buenas para alfombras y ropa.
Un viejo problema
En todo el mundo se producen anualmente alrededor de 359 millones de toneladas de plásticos, de los cuales aproximadamente 150-200 millones de toneladas terminan en vertederos o en el medio ambiente.
La enzima que come plástico podría ser de gran beneficio no solo para el medio ambiente sino también para Carbios, que ha estado trabajando intensamente durante años en la descomposición a gran escala de PET usando enzimas y que también ha financiado el desarrollo de esta enzima.
Dentro de cinco años, Carbios tiene la intención de llevar el nuevo proceso de reciclaje al mercado a escala industrial. Esto podría valer la pena porque el costo de la enzima es solo el 4% del costo del petróleo crudo requerido para producir una cantidad comparable de botellas de plástico nuevas.
Aunque las botellas de PET aún deben triturarse y calentarse, el nuevo proceso es rentable, dijo Martin Stephan, subdirector gerente de Carbios.
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