Ennio Morricone y John Williams, dos músicos, dos premios Princesa de Asturias de las Artes 2020.
El jurado calificador de la Fundación Princesa de Asturias anunció ambos nombres como los ganadores luego de haberse reunido de forma telemática. La razón de estos tiempos, la crisis ocasionada por la pandemia de la COVID-19 en el mundo y que ha impuesto el distanciamiento social.
Ambos compositores, uno de origen italiano y el otro estadounidense, son leyendas vivas del cine. Son los autores de algunas de las bandas sonoras más notables de la historia del séptimo arte. Películas como Cinema Paradiso y La lista de Schindler son una muestra. La banda sonora de la primera le corresponde a Morricone; la segunda, a Williams.
El jurado calificador quiso reconocer su labor, dominio, capacidad para transmitir imágenes y sentimientos, además de evocar, a través de la música en las pantallas y de contribuir, asimismo, a historias inolvidables.
«La música del cine, con su poder de comunicación y de evocación de imágenes, historias y situaciones, ha trascendido en muchas ocasiones a las películas para las que fue creada. Las innumerables composiciones que han escrito Morricone y Williams no solo han sido un telón de fondo para acentuar atmósferas o definir personajes, sino que han traspasado la pantalla y han sabido mezclar perfectamente los fondos de la historia de la música con el sonido de su tiempo, sin olvidar su propia idiosincrasia»
Ennio Morricone y John Williams, ambos músicos, ambos artistas
Ennio Morricone, compositor y director de orquestas italiano. Nació en Roma en 1928, un año antes de la Gran Depresión. Hijo de un músico, comenzó a estudiar la trompeta cuando era un niño. A los 6 años de edad había escrito su primera composición.
Ya graduado, fue un copista fantasma. Trabajó componiendo música para películas, que atribuían a conocidos compositores de la época. Sin embargo, poco tiempo después se hizo famoso por sus composiciones de música de fondo para programas de radio. Al poco tiempo daría el gran salto al cine. Ha compuesto la banda sonora de más de 500 películas y series de televisión.
En la pantalla grande se destacan Por un puñado de dólares (1964), La muerte tenía un precio (1965), El bueno, el feo y el malo (1966) y Hasta que llegó su hora (1968). Sus composiciones para La misión (1986) y Cinema Paradiso (1988) son consideradas obras maestras.
Detrás de Tiburón
John Williams, compositor y director de orquesta de Estados Unidos. Nació en Nueva York en 1932. Hijo de un percusionista de jazz, es compositor de las bandas más notorias del cine: Harry Potter, Tiburón, E. T., el extraterrestre, Superman, Star Wars, La lista de Schindler, entre otros.
Ha trabajado con el director y productor Steven Spielberg desde 1974 y se ha encargado de la música de casi toda su obra. También ha hecho composiciones musicales para Juegos Olímpicos.
Ganador de varios reconocimientos, 5 Oscar y 52 nominaciones a este premio, es considerado el segundo más postulado en la historia del galardón después de Walt Disney.
Premio Princesa de Asturias para las Artes 2020
Con su elección, el jurado del Premio Príncipe de Asturias quiso reconocer “el valor fundamental de la creación musical para el cine” a través de “dos de los compositores vivos más venerados en todo el mundo”. Ambos “han enriquecido con su talento cientos de películas”.
Por el momento, la organización ha reconocido la labor del personal sanitario que lucha en la primera línea de la batalla contra la COVID-19. De ahí que les haya concedido el Premio Princesa de Asturias de la Concordia 2020.
En el caso de la categoría de las Artes reconoció la labor y trayectoria de ambos músicos:
“Mientras que Morricone construyó su reputación poniendo música desde Europa al Lejano Oeste americano, Williams trasladó el espíritu de la tradición sinfónica vienesa a grandes éxitos de Hollywood”. A su vez, alabaron la extensa y variada obra que tienen en común “su deslumbrante capacidad para traspasar géneros y fronteras”.
Ambos muestran “un dominio absoluto tanto de la composición como de la narrativa, aunando emoción, tensión y lirismo al servicio de las imágenes cinematográficas”, indicó la nota de prensa publicada por la página de la fundación. Agregó que están dotados de una inconfundible personalidad.
“Sus creaciones llegan incluso a transformarlas y trascenderlas, sosteniéndose por sí mismas como magníficas obras sinfónicas que se encuentran entre el repertorio habitual de las grandes orquestas”, afirmaron.
Morricone, en sus palabras por el premio, indicó:.
He elegido escribir música como una forma de comunicación. La música, de hecho, sin que haya nadie que la escuche, no tiene sentido. (…) Tengo 92 años y veo que la familia real de España y la Fundación Princesa de Asturias quieren reconocerme con este prestigioso premio. Hoy es un día para reflexionar y pensar en el camino recorrido, sentir con humildad y gratitud que, quizá durante mi trabajo, he sido capaz de llegar a las personas y compartir con ellas la experiencia única que es la música. Esto es lo que significa para mí el Premio Princesa de Asturias de las Artes.
El Premio Princesa de Asturias se creó en 1981 y consta de una escultura de Joan Miró, 50.000 euros, un diploma y una insignia (por ejemplo, una medalla para reconocer la labor del premiado).
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