Transformar el CO2 en energía limpia ya puede ser posible. Un plan ambicioso de Bill Gates, el cofundador de Microsoft parece que hará esta premisa realidad. La propuesta es detener el calentamiento global produciendo combustible limpio. Hasta ahora las pruebas han logrado extraer CO2 del aire y usarlo para producir una mezcla de gasolina y diésel.

La propuesta que tiene la inversión directa de Microsoft está respaldada por Carbon Engineering.  Esta es una compañía de Gates con sede en Canadá que  ya ha logrado eliminar toneladas de dióxido de carbono del aire.

El tema de la contaminación del ambiente no es nuevo. Tampoco la lucha para combatirlo. Muchos países han implementado estudios y soluciones. El último informe anual de la Organización Meteorológica Mundial (OMM) advertía de un nuevo récord en el tema. En 2015 la concentración de CO2 en el aire alcanzaba por primera vez las 400 partes por millón. En 2017 se superaron las 403. “La última vez que la Tierra conoció una cantidad de dióxido de carbono comparable fue hace entre 3 y 5 millones de años. La temperatura era entre 2 y 3 grados más alta y el nivel del mar era 10 o 20 metros mayor que el actual”. Refiere la OMM.

CO2 en energía limpia

La propuestas de Gates de transformar el CO2 en energía limpia es concreta. Se trata de combinar la captura de carbono y la síntesis de combustible para ampliarlos alimentarlos con energía solar. Con esto se podría limpiar el planeta y a su vez da una nueva fuente de combustible neutro en carbono. Este proceso utiliza menos tierra y agua que los biocombustibles. La compañía calcula que para descontaminar el ambiente una vez ampliada se podría producir combustibles por menos de $ 1 por litro.

El proceso es conocido como «aire para combustibles» (o A2F) y consta de tres pasos principales:

• Primero, el CO2 se captura del aire y se purifica. La instalación en Squamish ya elimina una tonelada de CO2 por día de la atmósfera. Previó a esto se devolvió al aire ya que el resto del proceso no se desarrolló lo suficiente.
• Luego se utiliza electricidad limpia, como la energía solar, para dividir el hidrógeno del agua.

Y por último el CO2 y el hidrógeno se sintetizan en combustible, como el diesel y el combustible de aviación. Los combustibles producidos de esta manera también son más limpios que los combustibles fósiles. Sin embargo al propuesta, como todo, también tiene sus detractores. Los críticos aseguran que la principal prioridad del mundo no debería ser capturar CO2. Debería ser sino emitir menos CO2.

Sin embargo Bill Gates asegura que los gobiernos y las empresas necesitan invertir más en el área. Es decir  tener una amplia gama de tecnologías energéticas de vanguardia. Esto va desde los combustibles solares hasta las redes más eficientes.  «Los avances en las tecnologías energéticas podrían reducir la contaminación del aire. Y ayudar a las personas a escapar de la pobreza y evitar los peores efectos del cambio climático», dijo.

Combustible de baja concentración para descontaminar el ambiente

La idea de transformar el CO2 en energía limpia no solo sacaría del aire el CO2. Además lo convertiría en combustible de baja concentración. La empresa invertida por Bill Gates extraería el gas que emiten las fábricas. Luego lo transformaría en una fuente de energía menos contaminante que los combustibles fósiles. Y al final se lo vendería a las propias industrias y a los medios de transporte. El resultado final es que estas empresas pasarían a emitir menos dióxido.

Se espera que la planta pueda generar 400 litros diarios, para comercializarlo el año que viene. Los lugares con mayor de concentración de CO2 se encuentran en zonas industriales. Por esta razón Carbon Engineering instalará su tecnología lo más cerca posible de las chimeneas de las fábricas. Si el dióxido se absorbe casi al mismo tiempo en que pasa a formar parte del aire. Además se transforma en combustible.