Las largas filas de coches en las estaciones de servicio se han extendido en varias regiones del Reino Unido, por la crisis de combustible (gasolina y diésel). Mientras cientos de consumidores han realizado compras nerviosas de alimentos por los fallos en la cadena de distribución. Ante la apremiante situación, el secretario de Comercio, Kwasi Kwarteng, afirmó que hay indicios de que esta contingencia se está «estabilizando».
Dijo que entre los planes para atenuar la crisis, se prevé la participación del Ejército. Los soldados entregarían combustible en los próximos días para ayudar a aliviar los problemas de suministro. Además señaló que el gobierno no descarta recurrir a su flota de reserva de petroleros.
Entretanto, la Asociación de Minoristas de Gasolina (PRA), que representa a casi 5.500 de las 8.000 estaciones de servicio del Reino Unido, indicó que hay «señales tempranas» de que la presión está comenzando a disminuir en las bombas, según recogió BBC News. E informó que el 37% de las explanadas propiedad de sus miembros se quedaron sin gasolina el martes, en comparación con dos tercios el domingo.
Sin embargo, el líder laborista Sir Keir Starmer utilizó su discurso en la conferencia del partido para criticar el manejo de la crisis por parte del gobierno,. Acusando a los ministros de no tener un plan para enfrentarla.
El gobierno de Boris Johnson se ha agilizado algunas medidas. Hasta el momento, suspendió en forma temporal las leyes de competencia del sector del combustible para facilitar que las compañías puedan compartir información y optimizar el suministro a las gasolineras.
Asimismo anunció que entregará 5.000 visados temporales para transportistas europeos. Esos permisos deberían paliar la falta de camioneros y de personal en sectores claves de la economía británica, como la cría de aves de corral.
Reino Unido busca salidas a crisis de combustible
La crisis de combustible en el Reino Unido se agudizó hace un par de días. Luego de que BP y Tesco Alliance anunciaran que un número de estaciones de servicio cerrará temporalmente debido a la falta de conductores de transporte.
La escasez de transportistas ha provocado una interrupción de la cadena de suministro en ese país en la era posterior al Brexit. Los estantes vacíos en los supermercados y las largas colas en las estaciones de servicio. Así como el cierre de las estaciones de servicio han puesto al gobierno británico en aprietos.
El Ministerio de Defensa está preparando a unos 150 conductores militares calificados para entregar combustible, y tiene otros 150 miembros del personal listos para apoyarlos.
Igualmente el Departamento de Negocios, Energía y Estrategia Industrial (BEIS) dice que también utilizará parte de la flota de reserva de 80 petroleros que el gobierno mantiene para emergencias.
Adicionalmente, el gobierno ofrece visas temporales a 5.000 conductores extranjeros de camiones cisterna de combustible y camiones de alimentos (así como a 5.500 trabajadores avícolas) en el período previo a la Navidad. Aunque algunas organizaciones empresariales, como las Cámaras de Comercio Británicas, lo han criticado como «insuficiente».
El proceso para obtener una licencia de conducir de vehículos pesados se acelerará. Y se enviaron casi un millón de cartas a los conductores de vehículos pesados existentes para animarlos a volver a la industria. Además de que hay planes para capacitar a otros 4.000.
Pese a que gobierno tiene poderes para limitar la cantidad de combustible que los conductores pueden comprar y las horas en las que pueden hacerlo, no hay indicios de que planee usarlos. Sin embargo, según la BBC News, algunas estaciones de servicio han introducido un límite de 30 libras en la cantidad de gasolina que la gente puede comprar.
Mucho más que las compras de pánico
La situación recuerda a los años 1970, cuando la crisis de combustible del Reino Unido obligó a racionarlo y a reducir la semana de trabajo a tres días. Hace unos diez años, las manifestaciones contra el alto precio de la gasolina también provocaron un bloqueo de las refinerías y paralizaron la actividad del país durante semanas.
En esta ocasión, la falta de conductores ha causado problemas a una variedad de industrias. Desde supermercados hasta cadenas de comida rápida. Estos choferes de cisterna necesitan calificaciones de seguridad adicionales además de su licencia de HGV para poder transportar productos químicos como gasolina.
¿Hay peligro de que se acabe la gasolina? No, las compañías petroleras han enfatizado que hay mucho combustible disponible.
Dicen que la escasez se debe a «picos temporales en la demanda de los clientes», o como dijo el presidente de la PRA, Brian Madderson, «compras de pánico, pura y simplemente».