El sector manufacturero de España apenas creció en mayo, según una encuesta publicada el lunes, ya que la producción se estancó y la creación de empleos cayó por primera vez desde finales de 2013.
El Índice de Gerentes de Compra (PMI) de Markit de las empresas del sector manufacturero, lo ubicó en 50,1 en mayo. La cifra contrasta con el 51,8 en abril y justo por encima de 50. Esta es la línea que separa el crecimiento de la contracción.
Paul Smith, director de Economía de IHS Markit, sostiene que el sector manufacturero de España soportó un mayo desafiante. Asegura que en ese mes los productores de bienes de inversión tuvieron un momento particularmente complicado.
«Los fabricantes de bienes de capital se enfrentan a un entorno de demanda internacional difícil, ya que la demanda procedente de los principales mercados europeos, especialmente del sector automotriz alemán, está decayendo», agregó.
Las elecciones generales a finales de abril y los comicios europeos y regionales a finales de mayo también provocaron cautela en las empresas y retrasaron las decisiones de contratación, precisó Smith.
Sector manufacturero de la eurozona ahondó su caída en mayo
La actividad del sector manufacturero en la zona euro se contrajo por cuarto mes consecutivo en mayo. Esta vez a un ritmo más rápido, que se atribuye a la guerra comercial entre EEUU y China, la caída de la demanda en el sector automovilístico, el Brexit y la incertidumbre geopolítica.
El índice PMI final del Sector Manufacturero IHS Markit fue de 47,7, lo que coincide con el dato adelantado, aunque se ubicó por debajo del 47,9 de abril y solo un poco por encima del dato de marzo, cuando tocó un mínimo de seis años.
Un índice que mide el cambio de producción, que se incluye en el PMI compuesto que se publica miércoles y que se considera un buen indicador de la salud económica, también se mantuvo por debajo de la marca de 50 que separa el crecimiento de la contracción. Este se ubicó en 48,9 y en abril fue del 48,0.
«El sector manufacturero de la zona euro se mantuvo en territorio de contracción en mayo, sugiriendo que el sector actuará como un lastre para la economía en general en el segundo trimestre», dijo Chris Williamson, economista jefe de negocios de IHS Markit.
«Una cuarta caída mensual consecutiva de la producción y un nuevo declive intenso de los nuevos pedidos subrayó que el sector manufacturero continúa en su fase más difícil desde 2013», agregó.
Al evidenciar que no habrá un cambio de rumbo pronto, el índice que mide los nuevos pedidos se mantuvo por debajo del umbral de 50 por octavo mes, aunque subió a 46,6 desde los 45,8 de abril.
Los resultados de la encuesta constituyen un nuevo indicio de que la economía del bloque está bajo presión. Y probablemente preocupe a los responsables de la política monetaria del Banco Central Europeo. Estos comienzan a plantear la posibilidad de recibir un mayor apoyo.
Actividad manufacturera china creció a ritmo estable
Mientras tanto, la actividad del sector manufacturero en China se expandió a un ritmo constante pero modesto en mayo. Los pedidos de exportación se recuperaron de una contracción, de acuerdo con una encuesta privada. Sin embargo, el panorama económico general fue mixto con una desaceleración de la producción y un estancamiento en los precios.
Es poco probable que la lectura del sector manufacturero ligeramente mejor a lo esperado, disipe los crecientes temores sobre el impacto en China.
Un indicador oficial de la actividad fabril muestra que las condiciones se deterioraron en la medida que disminuye la demanda interna y externa.
El Índice de Gerentes de Compras de Manufactura Caixin/ Markit (PMI) también mostró una expansión modesta a 50,2, sin cambios desde abril. Y por encima de las expectativas de los economistas de 50,0.
Es el tercer mes en que el índice se mantiene por encima de la marca de 50 que divide la expansión de la contracción.
El crecimiento de los nuevos pedidos repuntó en mayo, aunque la tasa de expansión siguió siendo marginal.
Los encuestados atribuyeron el aumento de las ventas a una mayor demanda externa. Y al lanzamiento también de nuevos productos, ya que las órdenes de exportación aumentaron a su ritmo más rápido desde enero tras una contratación en abril.
Pero algunos también citaron la dura competencia y las condiciones comerciales más desafiantes.
A diferencia de la encuesta oficial de fábricas que es más amplia, el indicador privado se centra principalmente en las pequeñas y medianas empresas exportadoras. Y al mismo tiempo más expuestas a las turbulencias por la guerra comercial.
La encuesta de Caixin mostró que la producción del sector manufacturero se expandió a su ritmo más lento desde enero. Y que mientras algunas empresas aumentaron la producción para cumplir con mayores pedidos, otras destacaron condiciones de demanda relativamente moderadas.
Una parte considerable del programa de apoyo económico de China ha estado orientado a mantener a flote a las pequeñas empresas.
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