El número de hogares unipersonales ha aumentado en Japón y también los problemas relacionados con la soledad y el aislamiento, incluidas las privaciones económicas y el suicidio. Se estima que unos 68.000 ancianos mueren anualmente solos en casa.
Un total de 21.716 personas murieron en solitario en sus hogares durante el primer trimestre de 2024, el 80% de tenía 65 años o más. La Agencia Nacional de Policía informó que la investigación abarcó 60.466 muertes durante los primeros 3 meses del año. Un total de 21.716 eran personas que vivían solas, incluidas las que se quitaron la vida. Por grupos de edad, las personas de 65 años o más representaron casi el 80%. De las cuales, 2.080 personas tenían entre 65 y 69 años; 3.204, entre 70 y 74; 3.480 entre 75 y 79; 3.348, entre 80 y 84; y 4.922 de 85 años y más.
El funcionario Kazuhito Shinka dijo que aproximadamente 68.000 personas mayores mueren anualmente solos en casa. El gobierno anunció que utilizaría los datos diseñar políticas para evitar esta compleja situación social de aislamiento y soledad que arreció durante la pandemia de COVID-19. El apoyo a las personas que viven y envejecen solas está cobrando mayor importancia en la agenda político con el mayor envejecimiento y la cada vez más decreciente tasa de natalidad,
Penosa situación de las personas mayores en Japón
Las estadísticas del Gobierno indican que el porcentaje de hogares unipersonales se situó en 36% en 2020. La proyección es que siga siendo alto en el futuro. El porcentaje de mayores de 65 años era del 28,6% en 2020 y también se espera que siga aumentando. «La probabilidad de muerte solitaria seguramente aumentará. Es importante que abordemos el problema de frente y de manera adecuada», afirmó el ministro de Sanidad, Keizo Takemi, según el diario The Asahi Shimbun.
El Instituto Nacional de Investigación sobre Población y Seguridad Social prevé que la cantidad de personas mayores de 65 años que viven solas aumentará de 7,38 millones en 2020 a 8,87 millones en 2030, y a 10,84 millones en 2050. Se teme que aumente el número de personas mayores que mueren solas sin que nadie se dé cuenta y por descuido propio.
La expresión koritsushi (muerte aislada) entró en el léxico popular japonés luego del Gran Terremoto de Hanshin de 1995. Desde entonces muchas personas mayores se ven desarraigadas de sus comunidades y obligadas a vivir en alojamientos provisionales durante un plazo largo. Algunas de ellas entraron en estado de autodescuido. Se negaban a cuidar de sí mismas o a recibir ayuda de otras personas. La demencia y las enfermedades mentales a menudo desencadenan ese estado. El gobierno admite que necesita encontrar formas de ayudarlos para que vivan con dignidad.
Muchos ancianos, pocos nacimientos
Un informe del Instituto de Investigación sobre koritsushi y autoabandono de 2011 precisaba que el 70% de los municipios nipones no estaban recopilando datos sobre casos de muertes solitarias. Mientras que el 85% ni siquiera tenía una definición clara de tales muertes. En este contexto, en agosto pasado se creo un grupo de trabajo de expertos para investigar la situación actual en torno a las muertes solitarias de personas mayores.
Japón, con 125,18 millones de habitantes tiene una alta densidad de población: 331 habitantes por Km2. Estadísticas oficiales afirman que entre octubre 2022 y 2023, el país perdió 837.000 ciudadanos, la mayor disminución anual desde 1950. Una disminución diaria de 2.293 personas. Las 96 personas que mueren no son compensadas con nacimientos. No hay nacimientos suficientes que releven a los ancianos. El número de bebés nacidos en 2023 fue de sólo 758.631, una caída del 5,1% con respecto al año anterior.
De la población general, unos 36,23 millones de personas tienen 65 años o más, lo que supone un 29,1 % del total. De esa cifra, 56,6 % son mujeres (20,5 millones). Solo15,72 millones de varones superan los 65 años el año pasado. Muchas de las personas mayores viven solas. Sin hijos u otros familiares que pueden cuidarlos. Las estimaciones sugieren que habrá menos ancianos solos y sin descendencia en los próximos 30 años.