Por Ores Lario
15/12/2015
Año 1820. El Essex, un ballenero de Nueva Inglaterra, sufre el ataque de un inmenso cachalote mientras navega por aguas del Pacífico. El enfurecido animal, de 26 metros -el mismo largo que la embarcación-, derriba y hunde el barco con dos golpes certeros en la proa y obliga a 20 marineros a refugiarse en botes. Han salvado del naufragio algo de agua dulce, galletas y un par de tortugas, y cuentan con provisiones para dos meses.
Con los cazadores de ballenas perdidos en la inmensidad del océano comienza el verdadero drama que llega a límites inimaginables en la lucha por la supervivencia. En un clima de desesperación y adversidad, la travesía duró tres meses y tuvo al hambre, la sed, el pánico, la desesperación y el canibalismo como protagonistas.
Este sombrío suceso se relata en el libro En el corazón del mar, escrito por el norteamericano Nathaniel Philbrick, que en España edita Seix Barral.
El del Essex es uno de los desastres marítimos más conocidos del siglo XIX y en él figuran cuestiones como la clase social, la raza, la dominación y la relación del hombre con la naturaleza y es la historia que inspiró la escena culminante de Moby Dick, de Herman Melville. El autor se nutrió de los relatos de Owen Chase, primer oficial del buque.
La narración de Philbrick ha servido de inspiración para la película En el corazón del mar, dirigida por Ron Howard y protagonizada por el australiano Chris Hemsworth, que en su segunda semana en cartelera ha conseguido alcanzar el pódium del ranking de la taquilla norteamericana.
En España, sin embargo, el filme no ha logrado desbancar a Ocho apellidos catalanes. Y todo a la espera de lo que acontezca con el inminente estreno de la última saga de Star Wars.