Miles de inmigrantes que llegan a las costas de Canarias en pateras han sido temporalmente ubicados en varios de los complejos turísticos desocupados por el frenado en la hostelería que trajo la segunda ola de la pandemia. El Gobierno dispuso de sus instalaciones para plazas de acogida humanitaria.
El Ministerio de Inclusión Social se ha encargado de ese proceso. Financia 5.748 plazas de acogida de inmigrantes en el archipiélago, el doble que a principios de octubre, cuando alcanzaban a 2.698. Del total, 4.500 están en 12 complejos turísticos que se encontraban sin actividad debido a la crisis sanitaria.
A finales de septiembre, el ministro José Luis Escrivá se quejó de la falta de solidaridad de los cabildos, ayuntamientos y corporaciones canarias ante el drama humanitario de inmigrantes que arriban a Canarias. Dijo entonces: “Nos encontramos con la resistencia local a aportar soluciones”.
El Ejecutivo contaba con la colaboración de recursos cedidos por el Gobierno de Canarias, algunos cabildos y varios ayuntamientos. Pero, en vista de que los complejos turísticos estaban cerrados por la pandemia, los convirtieron en albergues de acogida.
Los primeros centros turísticos acondicionados fueron los apartamentos Vistaflor, en Maspalomas (Gran Canaria). La adecuación permitió un alivio transitorio al campamento de emergencia del muelle de Arguineguín. Ahora en crisis de saturación.
La iniciativa, además, impulsó a que ese complejo sacara del ERTE a medio centenar de empleados. Y volviera a facturar con sus proveedores.
De las 5.748 plazas de acogida operativas en Canarias, el 78 % corresponde a complejos turísticos, unas 4.483.
Más y más inmigrantes llegan a Canarias
Cada día llegan más inmigrantes del norte de África a las costas españolas. Arriesgando sus vidas, se embarcan en pateras en busca de una vida mejor. Desnutridos, deshidratados, con dolencias, pero con muchas ganas de emprender un nuevo camino de progreso y estabilidad.
En su visita a Canarias, Escrivá cambió el tono y agradeció a todas las organizaciones no gubernamentales, y en especial a Cruz Roja, la ayuda que prestan en la acogida inmigrantes.
El ministro presenció el desembarco de una de las tantas embarcaciones que llegan a esas playas. Escuchó los relatos y sufrimientos de esos inmigrantes y comentó haber constatado la dimensión real del problema.
Escrivá subrayó la “solidaridad tradicional del pueblo canario”. También dijo que es «consciente de la situación excepcional que se está viviendo en algunas islas en las últimas semanas”. Hasta ahí.
Se conoció que los costos de estos complejos turísticos, unido a la llegada de turistas internacionales durante el invierno a Canarias, acelera la búsqueda de soluciones. También confió que está gestionando en las islas hasta 1.800 plazas potenciales en 380 viviendas de la Sareb y varios espacios militares.
El Ministerio de Defensa confirmó que cede tres espacios en Canarias para acoger inmigrantes. El cuartel de Las Canteras, en La Laguna (Tenerife) y unas instalaciones en Barranco Seco, en Las Palmas de Gran Canaria. Así como El Matorral, en Puerto del Rosario (Fuerteventura), que necesitan obras de adaptación.
Los canarios miran para el cielo para ver si a ellos le cae algo.
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