Un candidato a la Presidencia de Bolivia informó este lunes que padece coronavirus y un ministro del gobierno interino fue aislado por precaución. La noticia sacude al Poder Ejecutivo que ya tiene tres casos confirmados, entre ellos la titular de Salud. Además, el número de infectados aumenta y la creciente mortalidad ha colapsado los cementerios en algunas ciudades.
El médico y pastor presbiteriano Chi Hyung Chung, candidato presidencial por el partido Frente para la Victoria (FPV) para las elecciones del 6 de septiembre, informó a través de un video en redes sociales que padece de coronavirus.
«Vengo atendiendo a pacientes con la COVID-19 desde hace más de un mes, no podía dejar que nuestras amistades se mueran en los pasillos, en las calles y por eso tuve que atenderlos de manera personal», narró.
Elecciones a segundo plano
Chi Hyung Chung señaló que ahora las elecciones no son de «su interés prioritario». Dijo que las personas están muriendo en las calles, hay familias de luto y que «no es momento de estar jugando con la salud» del pueblo.
También denunció que quieren cerrar su clínica por atender a pacientes contagiados de la enfermedad. Culpó al gobernador de Santa Cruz, Rubén Costas, y a la presidenta y también candidata, Jeanine Áñez.
Chi Hyung Chung quedó tercero en las elecciones anuladas de octubre pasado con casi 9%, en el video mientras recibía oxígeno de un tanque.
El mensaje del candidato se insertó en medio de una tensa discusión política. Por un lado, el gobierno de Áñez que pide postergar las elecciones por la pandemia. Mientras, el Movimiento al Socialismo (MAS) del destituido expresidente Evo Morales la acusa de nuevas maniobras para perpetuarse en el poder. Añez alcanzó la presidencia mediante una designación del Senado.
En medio de la tensión política, el ministro de Trabajo, Óscar Mercado, ingresó en aislamiento preventivo. Su prueba de coronavirus dio negativa. Pero una parte del grupo de su seguridad está contagiada.
Colapsa cementerio en Cochabamba
Un grupo de personas bloqueó el viernes el ingreso al Cementerio General de la ciudad de Cochabamba. Los manifestantes rechazaban la entrada de carros fúnebres, la cremación de personas fallecidas con sospecha de coronavirus y los entierros en fosas comunes.
Protestaron a las puertas del camposanto con letreros que decían: «No queremos fosas comunes, no queremos más cremaciones. Tememos por nuestra salud».
«Nosotros no vamos a permitir el crematorio ni fosas comunes, porque tenemos niños, mujeres embarazadas y adultos mayores», argumentó una de las vecinas. La mujer sostuvo que las personas aledañas al cementerio sienten dolor de cabeza, garganta y el olor que sale del crematorio es nauseabundo.
Por ello se niegan a aceptar la ampliación de las fosas y del crematorio, que es el único en la ciudad, y que lleguen más cadáveres infectados del coronavirus SARS-CoV-2.
Un crítica situación
La situación para enterrar o cremar a un fallecido en Cochabamba es crítica. Las familias deben esperar días con los ataúdes en sus casas. Esta es una de las principales ciudades de Bolivia, con más de 600.000 habitantes, y una de las más atacadas por el coronavirus.
Ante ese panorama, el secretario de Gobernabilidad de la Alcaldía, Edwin Paredes, se reunió con los manifestantes. Les explicó que las fosas y el crematorio estarán dentro del camposanto, «alejadas de las viviendas». Aseguró que se cumplen las medidas de bioseguridad.
«Apelamos a la población que un poco reflexione al respecto, nos da mucha pena que tengan que actuar de esta manera», señaló.
Conflicto político
En tanto, el ministro interino de Gobierno, Arturo Murillo, calificó de “crimen” la protesta. Se preguntó «cómo es posible que la gente tenga muertos en sus casas” y pese a ello se bloquea el acceso al cementerio.
Murillo pidió a la Policía y a la Fiscalía que actúen. Advirtió que detrás de las protestas están “algunos políticos”. En su cuenta de Twitter aseveró que los cerebros y financiadores detrás de bloqueos a K’ara K’ara, son los mismos de la manifestación en el cementerio. «Deben ser muy conscientes de las consecuencias que les acarreará», advirtió.
El ministro Murillo se refería al grupo de manifestantes denominados «autoconvocados», que desde hace una semana bloquea la entrada al botadero de K’ara K’ara, en Cochabamba exigiendo la liberación de sus dirigentes. Los acusan de terrorismo y se encuentran en la ciudad de La Paz con detención preventiva.
La Empresa Municipal de Servicio de Aseo suspendió la recolección de basura al verse imposibilitada de utilizar el botadero y todas las calles del municipio están llenas de bolsas de basura.
Las funerarias salieron con sus coches fúnebres para exigir más espacios para las tumbas y que se habilite otro horno crematorio. Manifestaron que sigue en aumento la cantidad de casos que requieren el servicio en Cochabamba.
Bolivia registró un total de casi 1.200 casos de coronavirus el 6 de julio.
Lea también: