Andrés Tovar | Luis Roberto Martínez
Actualización 02/06/2018
Las elecciones en México 2018 ofreció sus primeros resultados. Los resultados del Programa de Resultados Electorales Preliminares (PREP) del Instituto Nacional Electoral (INE) de México dan la victoria de las elecciones presidenciales celebradas este domingo en el país al candidato izquierdista del Movimiento Regeneración Nacional (MORENA), Andrés Manuel López Obrador, con un 53,5 por cientos de los votos. Ésto, con el 36,1 por ciento de las actas escrutadas.
En su informe de las 4.11 horas del lunes (hora local), el Programa de Resultados Preliminares del Instituto Nacional Electoral (INE) señala que López Obrador ha logrado 10,95 millones de votos en los comicios. Por su parte, el candidato de la coalición Por México al Frente, Ricardo Anaya, ha obtenido 4,7 millones de votos, lo que supone el 22,95 por ciento de las papeletas.
José Antonio Meade, de la coalición Todos por México, se queda en tercera posición, con 3,08 millones de votos. Tanto Anaya como Meade reconocieron públicamente sus derrotas y expresaron sus mejores deseos al nuevo mandatario. Los resultados oficiales definitivos se conocerán sobre las 11.00 de la mañana (hora mexicana).
En relativa calma
Las elecciones en México 2018 transcurrieron en relativa calma. Caracterizadas por una alta participación, las autoridades no reportaron mayores incidentes. Aunque en algunos lugares el desorden causó molestias y quejas de la población.
El secretario de Gobernación (Interior), Alfonso Navarrete, declaró a la prensa que «el país está en completa calma». Asimismo, consideró que «el país está preparado para el resultado electoral que los mexicanos decidan». Pese a estas declaraciones oficiales, la Fiscalía del estado occidental de Michoacán informó que Flora Reséndiz, integrante del Partido del Trabajo murió hoy en un hospital «tras haber sido lesionada con arma de fuego aproximadamente a las 06.30 horas, mientras estaba en su domicilio ubicado en la localidad de Pateo».
En cuanto al proceso, la Fiscalía Especializada para la Atención de Delitos Electorales (FEPADE) dijo que durante el proceso electoral en México se han presentado 1.106 denuncias con motivo de probables delitos electorales en el país.
Las autoridades dijeron que los estados con más denuncias son: Puebla (127), Ciudad de México (51), Estado de México (46), Chiapas (38), Oaxaca (29) y Veracruz (25). Hasta el momento hay 17 detenidos por la probable comisión de diversas conductas, dijo la fiscalía.
Unas elecciones históricas
Un peje, un tecnócrata y un niño maravilla encabezan esta batalla en donde los mexicanos elegirán al sucesor del presidente Enrique Peña Nieto. Unos comicios generales donde la izquierda llega como favorita por primera vez en más de 5 décadas y antecedida por un período de campaña pasado por sangre y fuego, el más violento de la historia reciente de México, que ha dejado más de 120 políticos asesinados.
El descontento generalizado entre los votantes está jugando a favor de AMLO. Se pintó a sí mismo como un candidato externo en un momento en que 4 de cada 5 mexicanos sienten que el país está en el camino equivocado. Aunque el escenario económico, el sector empresarial y no pocos en el escenario internacional lo ven como la opción que más incertidumbre al futuro puede traer a un México que necesita mantener la senda de la inyección económica iniciada por la Reforma Energética.
Un vistazo a las elecciones en México 2018
Así, más que la silla de Los Pinos (sede presidencial) y escaños disponibles, lo que está en juego en las elecciones en México 2018 va más allá de la presidencia. Aquí hay un vistazo a los conceptos básicos de la jornada, los perfiles de los candidatos y posibles coaliciones.
La carrera por los números
Más de 89 millones de votantes están registrados para participar en las elecciones en Mexico 2018. Principalmente para elegir al próximo presidente por un período de seis años conocido en ese país como sexenio. La ley mexicana no contempla la reelección presidencial.
Asimismo, se eligen una rotación completa de 128 senadores y 500 diputados para el Congreso bicameral del país. En el caso del Senado, los legisladores son elegidos por períodos de seis años. Con votantes en los 32 estados que eligen 64 senadores por mayoría relativa. Mientras que 32 escaños se asignan al partido que quedó en segundo lugar en cada estado.
Otros 32 senadores, llamados plurinominales, son elegidos por las partes y obtienen escaños en función de la representación proporcional. En el caso de la cámara baja, 300 diputados ganan escaños ganando una pluralidad de votos en sus distritos federales y otros 200 son plurinominales , elegidos por períodos de tres años.
La novedad re-electoral
Históricamente México, -desgastada por los siete mandatos de Porfirio Díaz como presidente que se remontan a principios del siglo XX- prohibió la reelección consecutiva para todos sus cargos políticos en la Constitución de 1917. Pero una reforma política de 2014 cambió todo eso. Ahora se permite la reelección consecutiva de legisladores en ambas cámaras. Aquellos que están en el poder ahora no pueden postularse nuevamente. Pero los que ganen este domingo pueden intentar ganar la reelección para permanecer en el poder por hasta doce años consecutivos. Dos períodos para senadores y cuatro para diputados.
Además de las carreras federales, casi un tercio de los estados de México elegirán nuevos gobernadores. La Ciudad de México votará por un nuevo jefe de gobierno, y ocho estados –Chiapas, Guanajuato, Jalisco, Morelos, Puebla, Tabasco, Veracruz y Yucatán– celebrarán elecciones para gobernador. Además de todo eso, las elecciones locales se llevarán a cabo en 30 estados. Alcaldes y los legisladores locales también podrán comenzar a buscar la reelección. Todo gracias a la reforma política antes mencionada.
Los candidatos
El peje
Andrés Manuel López Obrador (AMLO, su acrónimo) es un ex alcalde de la ciudad de México que va por tercera vez a la carrera presidencial, luego de quedar segundo en 2006 y 2012. De hecho, en la votación de 2006 llegó casi medio por ciento por detrás de Felipe Calderón y se negó a aceptar los resultados. En cambio, AMLO se declaró el «presidente legítimo», se «juramentó» e «instauró» un gobierno paralelo. Una movida que irritó a seguidores y detractores durante semanas en las calles de la capital.
Pero, 12 años después, los recuerdos se han atenuado y es posible que algunos votantes no recuerden realmente lo que sucedió en el 2006. Los millennials, que podrían representar cerca de la mitad del electorado, otorgan a AMLO una ventaja de 22 puntos sobre su próximo rival más cercano.
AMLO es apodado el peje por los peces lentos de su estado natal de Tabasco. Pero ha sido rápido en definirse a sí mismo como la opción antiestablishment para aquellos desilusionados con lo que él describe como la «mafia del poder». Sus críticos señalan que logró su piso político en el PRI antes de partir hacia el PRD y, más tarde, a MORENA.
Algunos lo describen como la respuesta de México al presidente estadounidense Donald Trump. AMLO lanzó oficialmente su campaña en la ciudad fronteriza de Ciudad Juárez (llamada así por el presidente mexicano que expulsó a los franceses) al decir que México «no será la piñata de ningún gobierno extranjero «. Los detractores lo comparan con Hugo Chávez y afirman que convertirá a México en «otra Venezuela».
- Lea también: Las incertidumbres en México se abrevian AMLO
El Niño Maravilla
Ricardo Anaya es el más joven de los candidatos con 39 años. Se ganó su sobrenombre ya que comenzó su carrera política con el Partido Acción Nacional (PAN) a la edad de 17 años. Y fue orador de la Cámara de Diputados cuando cumplió 34 años. Ha sido elogiado y ridiculizado por presentar su candidatura como «una charla TED». Asimismo, por definir sus actos de campaña como un hackathon. -un término utilizado en el argot tecnológico para referirse a encuentros de desarrolladores-.
Anaya generalmente es el segundo de la carrera. Se enmarca como la mejor esperanza frente a AMLO. O al menos hasta que salió a la luz un escándalo de lavado de dinero en febrero que involucró un trato de propiedad que hizo en su próspero estado natal de Querétaro. Anaya se defendió acusando al PRI -el partido gobernante- de utilizar la oficina del fiscal general para ir tras él. Pero Anaya tiene otro problema. Aquellos en su partido que apoyaron a Margarita Zavala como candidata lo pintan como un traidor que la bloqueó el camino y dividió el PAN.
El tecnócrata
José Antonio Meade ha ocupado diversos puestos importantes en el Ejecutivo mexicano, tanto en gobiernos del PAN como del PRI. Por ende, sus partidarios dicen que puede capturar los votos de ambas partes. Perseguido por el escándalo, el PRI cambió las reglas el año pasado para permitir que Meade, que no es un miembro del partido, sea su candidato. Pero no está claro si los votantes, casi la mitad de los cuales dicen que nunca votarán por el PRI , lo van a comprar.
El economista educado en Yale nunca se ha postulado para un cargo. Además, los partidarios del PRI tienden a provenir de peldaños económicos más bajos. Por ende ven a Meade, un ex secretario de finanzas, como la cara de los aumentos de los precios de la gasolina. (el llamado gasolinazo. Un movimiento que generó intensas protestas en todo México). Y creen que un gobierno de Meade aumentará todo. Desde el transporte a los costos de los alimentos. Meade apoya el mantenimiento de las reformas de Peña Nieto, desde lo fiscal hasta la energética.