POR CAMBIO16
09/07/2017
El Vaticano recordó este fin de semana en una carta a los obispos las reglas en vigor para seleccionar el pan y el vino de la misa, pronunciándose contra las hostias sin gluten pero autorizando los OGM (organismos genéticamente modificados).
La Congregación para el Culto Divino y la Disciplina de los Sacramentos elaboró un comunicado por encargo del papa Francisco en el que se recuerda las estrictas normas para la elaboración del pan y el vino destinados a la Eucaristía, como que las hostias no puedan ser sin gluten.
Aunque durante mucho tiempo, los sacerdotes obtenían el pan y las hostias en el propio seno de algunas comunidades religiosas, “hoy se venden también en los supermercados, en otros negocios y a través de internet”, explica esta carta enviada por el cardenal Robert Sarah, “ministro” del Culto y los Sacramentos.
La misiva pide a los obispos que garanticen un “respeto absoluto” de las normas canónicas por parte de los productores. Para los católicos, el pan y el vino se convierten en el cuerpo y la sangre de Cristo durante la misa, pero esta transformación solo es válida con productos conformes a reglas.
El pan tiene que ser ácimo (sin levadura), solo de trigo y horneado recientemente, elaborado por personas competentes e íntegras. Cualquier otro cereal solo es tolerado en mínimas proporciones, y el agregado de otros productos como frutas, azúcar o miel se considera “un abuso grave”.
El vino debe proceder únicamente de la uva, “del fruto de la vid, puro y sin corromper”, y los sacerdotes tienen que conservarlo en perfecto estado para que no se avinagre. Para las personas que no puedan consumir pan o vino fermentado, los obispos pueden utilizar mosto u hostias con poco gluten, pero no 100% sin gluten, para que siga siendo considerado en conformidad.
En cambio, el Vaticano “ha decidido que la eucaristía preparada con organismos genéticamente modificados puede ser considerada materia válida”, según el texto.
Polémica
Las disposiciones vaticanas han abierto la polémica, principalmente difundida a través de las redes sociales, pues muchos consideran que las precisiones sobre el uso del gluten en la hostias suponen una «discriminación» a las personas con condición celíaca. Algunos críticos han llegado incluso a referirse a una «excomunion» de los celíacos.
En este sentido, el Vaticano recordó que las hostias deben tener poco gluten, pero no 100% sin gluten. Asimismo, puntualizó que, en tiempos de compra y venta por internet, el Vaticano tomó las medidas para preservar la integridad y pureza de los principales elementos del sacramento católico de la Comunión.
Hay alrededor de 1.200 millones de católicos en todo el mundo.